Es raro que me siente a platicar de una película independiente (indie para los cuates) y menos de una que debí haber reseñado hace algunos meses (de hecho Upstream Color, traducida  como Los Colores del Destino, fue estrenada en México en la inauguración del Festival Internacional de Cine de Monterrey), pero el estreno a nivel comercial me obliga a platicarles un poco de la película que seguramente la veremos en las famosas «Sala de Arte» de algunos complejos cinematográficos.

Dirigida, escrita, filmada, musicalizada y protagonizada por Shane Carruth, Los Colores del Destino es un trabajo donde sin meter un gran presupuesto y realmente poco personal en la filmación, se puede contar una historia de ciencia ficción que ahonda en detalles en ratos difíciles de comprender y en donde mas que llevar palomitas, requieres llevar una taza de café bien cargado para poder entender la historia.

Esta historia nos cuenta como una chica es secuestrada por un hombre que, tras controlarla con una droga generada de una orquídea, le hace ingerir un gusano y la controla mentalmente hasta quitarle todo. Cuando se recupera, sin memoria y sin dinero, encontrará a un hombre que, al estar juntos, comenzarán a notar que, sin haber estado juntos antes, sienten una gran conexión con sus pasados, ¿podrán encontrar la manera de cerrar el ciclo que el delincuente ha comenzado?

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Escuchando música y generando tocino. Un placer que pocos tienen.

Es cierto, esta fue la forma mas fácil de contarles lo menos de spoilers de la historia, pero créanme, necesitarán mucha atención para entender lo que viene después, y también algo de estómago y firmeza, pues algunas escenas, sin caer en la espectacularidad, si les generarán diferentes emociones: duda, confusión, ternura, coraje y hasta asco. Estas escenas vienen aderezadas con una gran cantidad de colores donde predominará mucho el color azul y un trabajo musical, simple pero bien sincronizado con las escenas que le da aún mas extrañeza a lo que ven en el filme.

Se las recomiendo si van en un plan de ver algo realmente distinto o quieran ver algo que les invite a escribir sobre la cinta reflexionando lo que vieron. No es una cinta que entretenga a todos (algo comun en las cintas independientes), ni una cinta para cumplir con la presión social de salir al cine. Si tienen oportunidad en medio de las múltiples opciones que habrá en el cine éste 2014 les invito a verla con una mente abierta.

Calificación: 7.5