Cuando un juego diseñado para dispositivos móviles tiene el suficiente éxito parece inevitable que el juego tenga su adaptación a otros medios, usualmente a las consolas caseras, a veces dicha adaptación viene cantada y termina siendo algo decepcionante (¿alguien dijo Angry Birds?), mientras otras solo incrementan la adicción (el redactor no puede soltar Gems of War).
Tenemos el caso de King Oddball, un juego de puzzle que desarrolla 10tons Ltd. y, tras su paso por los dispositivos móviles y las consolas de Sony, ahora hace su llegada al Xbox One, ¿qué nos pareció este juego?
LA LENGUA QUE ATRAE… ROCAS
King Oddball es un enorme monstruo en forma de una piedra redonda, con una corona, cara de pocos amigos y una lengua enorme, con la que atrae unas enormes piedras redondas (usualmente hay tres en la pantalla) para lanzarlas a quienes intentan evitar que conquiste el mundo.
Lanzar la piedra consiste en que la lengua toma la piedra y hace movimientos pendulares alrededor de la cara de King Oddball, con solo presionar un botón esta piedra saldrá volando con cierta fuerza y dirección, la cual se genera con la fuerza que llevaba la piedra al momento de ser soltada, claro, si la lengua apenas tomaba fuerza o termina ese movimiento pendular, la piedra saldrá con poca fuerza, pero si la piedra tiene el suficiente impulso podrá tomar mucha distancia.
En todo caso tendrás que destruir los diferentes blancos que se te ponen en camino, que se representan en soldados, tanques y helicópteros, quienes estarán acomodándose en diferentes posiciones, ya sea que estén en puntos altos, aparentemente imposibles para que la piedra llegue hacia ellos, debajo de bases de ladrillo, arcilla o metal (el metal es difícil de destruir y tendrás que plantear otra manera sutil de destruir lo que esta adentro) y, a veces convenientemente, cerca de cajas explosivas que podrían ser útiles para hacer más devastador un lanzamiento de piedra.
Es entonces cuando deberás aplicar la estrategia y un poco de física para calcular de la mejor manera tus disparos pues tres piedras no parecerán ser suficientes para acabar con una cantidad superior de tropas, cabe mencionar que al lanzar la piedra, esta rebotará y puede llevarse más tropas de las planeadas, mejor aún, los explosivos harán que salga la piedra disparada y haga más grande la reacción en cadena, cuando vences a más de tres enemigos en un tiro, una piedra extra, en tono dorado, aparecerá y te permitirá intentar un tiro más.
Al final, si vences a las tropas tendrás una calificación basada en cuantas piedras sobraron o cuantas tropas cayeron en un disparo. Estas calificaciones realmente no afectan mucho, pero si te dejan con el gusanito de que pudiste jugar mejor algún nivel.
DESENTERRANDO LOS EXTRAS
Conforme avanzas en el mapa que incluye los más de 120 niveles que incluye el juego, puedes pensar que el juego no tiene manera de repetir los niveles, pero hay algo interesante en el camino, pues en diferentes partes de la pantalla encontraremos algunos secretos que extenderán mucho la experiencia de juego, como una serie de niveles donde tendrás que vencer algunos de los niveles convencionales con solo una piedra, y dos series de niveles donde el arma cambia, en una será una granada que explotará a los pocos minutos de tocar algún elemento de la pantalla y otra es una piedra en forma de cono que no rueda pero puede agarrar efectos distintos al rebotar.
Además hay un modo donde podrás repetir los niveles que ya has vencido en el juego, donde el reto será vencerlo con solo dos piedras, pues la tercera es un diamante y el objeto es quedarse con el diamante.
Como dato curioso, lo primero que vas a desbloquear en el juego son los logros que puedes conseguir durante el juego, más tarde las estadísticas del juego aparecen al llegar a cierto nivel del juego (estadísticas que te harán ver qué tan cerca estás de ciertos logros).
Si bien esto es una indicación de un juego que tiene mucho quedar a nivel entretenimiento, esta claro que no es un juego que dure mucho, sobretodo cuando aprendes rápido como usar la física de los disparos para resolver los acertijos.
Del control no hay mucho que decir pues solo ocupas un botón para jugar, si, solo un botón, el control no sirve para manipular el movimiento de la piedra, pues esta se mueve sola, los demás botones pausan el juego. Tan sencillo que un niño lo jugará tranquilamente.
La calidad gráfica no le exige mucho a la consola pero vale la pena jugarse en una pantalla grande en comparación a estarlo jugando en dispositivos móviles.
Lo que si pudieron pulir más fue la música pues su banda sonora es muy limitada y más importante, cuando te quedas atorado en un nivel, tendrás que escuchar la misma canción por mucho rato.
El diseño de los personajes y los fondos son simpáticos pero simples, algunas sorpresas aparecerán más adelante, como algunos campos de fuerza, helicópteros más temibles y soldados que parecen salidos de un juego de Killzone pero en caricatura.
En pocas palabras, tenemos que considerar a King Oddball como un juego que realmente al público casual y que sabe funcionar bien en los dispositivos móviles, pero es demasiado simple para estar en una consola, como para rellenar un tiempo muerto bastante corto esperando que se arme una reta en linea en otro juego o porque no hay más tiempo para otro juego.
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