El gerente general de América Latina de Pure Storage, Douglas Wallace, destaca la importancia de la tecnología 5G, pues revolucionará la forma en que vivimos y cómo interactuamos con nuestros dispositivos, esta conectividad es ultrarrápida y de latencia extremadamente baja, la cual puede hacer conceptos futuristas como la realidad virtual.

Sin embargo se menciona que esta tecnología está aún lejos de llegar a nuestro continente, aunque eso no quiere decir que las empresas de América Latina, no puedan comenzar a preparar infraestructuras para el manejo del aumento de uso de datos, especialmente en el almacenamiento.

El verdadero estado de 5G en América Latina promete ser un facilitador para el ecosistema digital, es decir, podría optimizar experiencias, digitalizar sectores como el transporte, la salud y la educación, por lo que podría cambiar de manera drástica la vida cotidiana de las personas.

De acuerdo con el reciente estudio de la Asociación Global de Proveedores Móviles (GSA), existen 201 operadores en al menos 83 países donde se has realizado pruebas y lanzamientos de 5G, sin embargo, en países desarrollados el 5G ya puede ser una realidad, pero para Latinoamérica podría llegar a mediados del 2020.

Por otra parte, los gobiernos deben implementar una política preparada para 5G, por lo que es necesario liberar el espectro suficientemente armonizado para la inversión en lugar maximizar los ingresos, se deben eliminar barreras de implementaciones costosas para mejorar le economía en la red.

Muchos de los proveedores de este servicio ya tienen todo el equipo necesario para implementarlo, pero aún necesitan una precisión técnica, además de debe definir un modelo de negocio claro para monetizar los servicios 5G. Por lo que América Latina tendrá que encontrar modelos de negocio para justificar la entrada de esta tecnología.

Finalmente los operadores continuarán invirtiendo en pruebas e implementaciones de 5G en las principales ciudades latinoamericanas, donde hay redes de fibra sólida y mayores ingresos promedio por usuario, así que los operadores y los gobiernos requerirán herramientas más completas y transparentes para administrar y comprender la disponibilidad de la red.