Para dar una reseña adecuada de un proyecto cinematográfico basado de un videojuego hay que dar un breve resumen de donde proviene y un poco de su historia y es así como vamos a ponerles al día a quienes tal vez no conocen cómo fue que inició todo esto de Assassin’s Creed.
Allá por el año 2007, la compañía de videojuegos Ubisoft lanzó el primer videojuego de Assassin’s Creed, el cual tuvo una inmediata aceptación por los temas que de cierta forma retomaban eventos y personajes reales del pasado, adaptándolos para el entorno del juego así como las motivaciones del personaje. Y es así como conocimos a uno de los personajes que de inmediato se convirtió en favorito de muchos, el Maestro Asesino Altaïr Ibn-La’Ahad, quien peleó en las Cruzadas contra la amenaza de los Templarios en varias ciudades árabes ahí por el siglo XII.
¿Cómo es que se saben tantos detalles de Altaïr y su vida? Para llegar al resultado esperado se necesita a una persona en específico y la característica principal que debe tener es ser un descendiente, para acceder a esta información que es obtenida a través de un sistema conocido como el “Animus”, el cual se adentra a la memoria genética de la persona y así alcanzar a visualizar a Altaïr. Y en esta etapa Desmond Miles es la persona que entrará en el “Animus” para revivir la historia de su antepasado.
La compañía Abstergo es la encargada de la investigación, desarrollo y creación del “Animus”. En apariencia realizan esta investigación para encontrar la evasiva “Manzana del Edén” y llevar a la humanidad a una nueva etapa de paz, pero a final de cuentas los integrantes de Abstergo tienen un secreto que guardar y la clave de todo esto recae en Desmond, quien conforme avanza va descubriendo una parte de la verdad al revivir el pasado de Altaïr.
Una de las partes que en su momento causo algo de polémica, era que para llegar a su objetivo Altaïr tenía que asesinar para así obtener información y al mismo tiempo evitar un mal mayor en contra de los inocentes, siendo este uno de los factores de su éxito y algo que lo dejaría en la clasificación restringida mature. Por otro lado la forma en cuanto al manejo del personaje, quien recurría dentro de su repertorio a una gama de movimientos espectaculares de pelea y sigilo, así como la inclusión de parkour al momento de recorrer los techos de las construcciones.
Posterior a la salida del primer Assassin’s Creed, Ubisoft se dio a la tarea de sacar por lo menos un juego al año, un movimiento que finalmente afecto al desarrollo de los juegos en factores como la historia, trama y la constante aparición de fallos en la programación, algo que trajo como resultado actual el ampliar a un periodo más prolongado el desarrollo de los juegos de la franquicia amada por muchos.
Algo que hay que destacar de Ubisoft es que siempre ha hecho énfasis al señalar que el equipo con el que desarrollan cada uno de sus juegos es un gran conjunto multicultural, multirracial con una diversidad de creencias religiosas.
Más recientemente y hace un par de años llegó la noticia de que Ubisoft y 20th Century Fox colaborarían para producir una cinta basada en la franquicia. El futuro por fin nos alcanzó y gracias a 20th Century Fox de México pudimos ver una de las películas más esperadas del año, la cual cuenta con la dirección de Justin Kurzel y las actuaciones de Michael Fassbender y Marion Cotillard, equipo que en 2015 participó en la cinta Macbeth. El elenco que participa adicionalmente está integrado por Jeremy Irons, Brendan Gleeson, Charlotte Rampling, Michael Kenneth Williams, Denis Ménochet, Ariadne Labed, entre otros.
Ahora compartiré con ustedes la reseña de la película Assassin’s Creed.
Callum Lynch (Fassbender) ha tenido una vida sumamente difícil ya que en su infancia fue testigo de la muerte de su madre a manos de su padre, algo que lo marcó para siempre y definió su camino, dejándolo actualmente sentenciado a muerte por un crimen que efectivamente cometió. Este podría ser el final de su existencia, pero no fue nada más que el principio. Luego de ser ejecutada la sentencia, Lynch despierta en una habitación extraña con una mujer observándolo. No sabe por qué está ahí y por qué está vivo. Sus preguntas se hacen cada vez mayores al intentar salir con la poca fuerza que tenía y descubrir que ya no estaba en los Estados Unidos. Su nueva ubicación es España.
Luego de salir de su estado de confusión inicial Lynch conoce formalmente a la persona quien estuvo a cargo de sus cuidados, quien se presenta como la Doctora Sofia Rikkin (Cotillard), quien le revela la importancia de su persona. La Doctora Sofia está a cargo de una investigación vital que podría salvar a la humanidad y derivado de esto traer una paz verdadera a nivel mundial. Su objetivo es mostrarle a Lynch quien fue en el pasado, un pasado desconocido para él y al cual en su estado actual no tiene acceso. Pero para llegar a esa memoria inactiva en el cuerpo de Lynch, se debe hacer uso de un equipo muy especial y es aquí donde él es conectado al “Animus”.
A través del “Animus”, Lynch conoce a su antepasado Aguilar, un antiguo asesino originario de la región española para descubrir un antiguo conflicto entre el gremio de los Asesinos y los Templarios, quienes buscan imponer una paz forzada para todos. Obviamente el «Animus» no puede ser costeado con el sueldo de una doctora y es aquí donde entra la compañía Abstergo, representada por Alan Rikkin (Irons), padre de la Doctora Sofia. En esta parte de la historia Lynch empieza a tener habilidades que antes no poseía y que de hecho son parte de la memoria genética, no solo experimenta ser Aguilar, también aprende de él y empieza a descubrir los secretos que hay dentro de su historia y este hecho es por el cual comienza a ser cada vez más presionado para entrar en el “Animus” y a través de las memorias de Aguilar encontrar un objeto para alcanzar las metas de una paz relativa.
En cuanto a la producción de 20th Century Fox y Ubisoft cumplieron con lo básico que era adaptar la forma en la que había sido concebido el videojuego a una versión cinematográfica, aunque por otro lado el guión afecta el desarrollo de la historia al mostrar de forma un poco precipitada los eventos, pero la parte positiva es que arriesgó en mostrar una historia diferente y que se aleja de lo visto en sus contrapartes virtuales, aunque contrariamente se desaprovecho el hecho de que pudo ser un poco más independiente y expandirse un poco más allá de lo que es la historia ya conocida por los videojuegos, además de eso la posibilidad de tener un camino propio para así ofrecer, dar espacio y oportunidad de contar con un adecuado giro final. El guión quedó a cargo de Michael Leslie, Adam Cooper y Bill Collage.
La guía en la dirección por parte de Justin Kurzel, que hay que mencionar no está nada mal pero se apega a lo que ya está predeterminado a pesar de que podrían haberse integrado más ideas propias y libertades creativas para que la cinta mostrará que no está completamente regida por su contraparte en el videojuego. El apartado de las actuaciones queda en un aspecto regular ya que, de cierta forma, les hace falta un poco de personalidad a los personajes principales de la cinta interpretados por Michael Fassbender, Marion Cotillard y Jeremy Irons.
En cuanto a las ambientaciones cabe destacar que son sumamente buenas, al mostrar el contraste de cuando el personaje de Fassbender se encuentra en la actualidad dentro del complejo y cuando entra al “Animus” y prácticamente está en la antigua España de la Inquisición, en la que se tomaron bastantes libertades creativas para el desarrollo de la historia en el pasado.
Para concluir está reseña, Assassin’s Creed tiene un desempeño regular que a futuro si se plantea la posibilidad de una secuela puede pulirse más en cuanto a la historia y guión para así ofrecer a los seguidores un buen universo cinemático que tal vez en un futuro no muy lejano llegue a coincidir con el de Ubisoft en sus juegos. Ahora que si no son conocedores del tema y fueron arrastrados por sus hijos para verla pero temen no entender no hay problema, el concepto básico de la historia muestra un personaje completamente nuevo que se aparta de su contraparte en los videojuegos y da una visión distinta aunque siendo una historia distinta se apega a varios elementos mostrados en el juego.
La recomendación final es que vayan a ver Assassin’s Creed ya que ustedes decidirán el grado de aceptación por esta propuesta cinematográfica.
Nuestro agradecimiento a 20th Century Fox en representación de Joseline García quienes tuvieron la amabilidad de invitarnos a la función de prensa.
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