Kingdom of Arcadia es un título de plataformas desarrollado por Ratalaika Games y Spoonbox Studios, y desarrollado a su vez por Eastasiasoft.
Kingdom of Arcadia se centra en la historia de Sam, un chico que es fanático de los videojuegos y encuentra una vieja arcadia que poseía su padre escondida, este le comenta que solo podrá jugar dicha máquina, cuando este preparado, y como buen adolescente, no hace caso y se dispone a jugar, cuando se percata que es absorbido y ahora es un personaje dentro del videojuego, ahí se entera que es el elegido y debe recolectar distintas varas que han sido robadas, para así ayudar a ese mundo de pixel y a su vez, que Sam pueda regresar sano y salvo.
El arte hace remembranza a un juego de antaño de pixeles, sin embargo, no se siente viejo, por lo que es agradable ver el entorno visual pixeleado, no es de esos títulos que heredan los errores o un gameplay obsoleto, sin embargo, visualmente se notará que muchos de los enemigos son el mismo patrón y solo le cambian un poco los skins, asimismo, los castillos varían en tonos, simulando que están en la nieve o en otros elementos, pero no afecta en nada en la jugabilidad.
La jugabilidad se centra en que controlaremos a Sam, en su skin de caballero, en donde podrá saltar, golpear con una espada y arrojar distintos objetos, ya sea hachas, martillos o flechas, en tu odisea por recuperar cada uno de las varas, tendrás que recorrer distintos castillos, cada vez que termines con uno podrás accesar a uno nuevo, por lo que el recorrido es lineal.
Cada castillo constará de 5 niveles aproximadamente y un nivel con un jefe final. Los niveles se completarán cuando llegues a la puerta de salida, para llegar a ella tendrás que derrotar a distintos enemigos, activar switches y en algunas ocasiones, enfrentarte a un mini jefe.
Los enemigos tienen patrones muy sencillos, el típico saltar para que te golpeen, o que solo caminas sin cesar o los que arrojan objetos u hechizos, nada que sea complicado.
Kingdom of Arcadia no es castigador, ya que si te golpean perderás un corazón, y si pierdes todos simplemente podrás reiniciar el nivel, sin penalización alguna.
La exploración o el diseño de los niveles es sencilla, hay muy pocas bifurcaciones en los caminos y casi siempre esos caminos te llevan a un camino sin salida, en donde obtendrás distintos beneficios, como encontrar cofres con monedas o con corazones. Para alentar un poco la exploración, en cada nivel hay cuartos escondidos, si los encuentras te darán más cofres o encontrarás un pequeño coleccionable en forma de monstruo volador.
Las monedas que vayas recolectando servirán para que puedas comprar distintos objetos en la tienda, estos objetos serán mejoras en tu ataque con nuevas espadas, en la defensa con armaduras, o incrementar el número de objetos arrojadizos.
En el apartado sonoro, no destaca, ya que consta de una melodía que se repite constantemente y hay efectos leves cuando recibes daño o en algunas escenas con ciertos enemigos, por lo que simplemente sirve de acompañamiento ligero, nada que sea aplaudible para el género del chiptune.
Para los amantes de los logros, les agradará saber que en un par de horas tendrás todos ya que solo te requiere que finalices exitosamente 2 de los 4 castillos a tu disposición, eso denota que la experiencia es corta.
