Durante la reunión de socios del día de hoy, el CFO de Electronic Arts Blake Jorgensen respondió a la pregunta sobre los rumores de que Sony y Microsoft estén planeando lanzar nuevas consolas PlayStation y Xbox respectivamente.

Jorgensen dijo que no tiene ningún conocimiento interno que compartir, pero explico que si eso pasara lo más probable es que esos dispositivos ofrezcan soporte de compatibilidad con las plataformas actuales.

“En términos de actualizaciones a mediados del ciclo, no puedo predecir,” dijo. “Lo que sí puedo decir es lo que hemos escuchado de los fabricantes de consolas: Están dándose cuenta que la compatibilidad es un problema en las consolas y que es de suma importancia para el consumidor.”

Específicamente menciono al Xbox One y su función de retro-compatibilidad, que fue presentado en el E3 pasado y que salió al público en general el pasado mes de noviembre. En el PS4, esta función está limitada a la transmisión remota de un cierto catálogo de juegos vía PlayStation Now por un precio, lo que no es nada similar a lo que el Xbox One ofrece.

La tan rumorada consola Neo, el nombre código para la nueva, y más poderosa PS4, se cree tendrá soporte para los juegos de PS4 y los nuevos títulos. Por su parte, Microsoft ha platicado sobre como espera que la librería de juegos se mueva contigo entre dispositivos.

“Eso es lo que va a ser importante para lo que el ciclo medio (actualizaciones de hardware) podrían tener si es que hay alguna [actualización],” expresó Jorgensen. “Remueve el riesgo asociado con lo que hemos experimentado históricamente con estos ciclos en las consolas.”

El ejecutivo de EA se aventuró a decir que tampoco está perdiendo el sueño sobre la posibilidad de nuevas consolas antes de que esta generación termine. Esto en parte porque EA ahora usa un solo motor (Frostbite) para todos sus proyectos. Este motor es adaptable y EA puede hacer juegos de una amplia variedad de géneros y para distintas plataformas –incluyendo aquellas nuevas.

Jorgensen explicó además que EA no está preocupada por la posibilidad de nuevas consolas debido a que la compañía posee una alineación diversa de otras fuentes de ingresos.

“Nuestro modelo de negocio es mucho más diverso hoy que en el pasado, debido a que esos ciclos históricos de consolas se ha convertido en algo irrelevante en nuestra habilidad de generar ganancias fuertes y buen flujo de dinero,” dijo.

“Así que estamos interesados en lo que Sony y Microsoft pueden hacer, si lo hacen, en el E3 o en algún otro momento del año. Estamos emocionados sobre el crecimiento continuo en el negocio y no estamos temerosos si ocurre algún cambio en el ciclo.”

Finalmente, durante la llamada, Jorgensen dio una actualización sobre cuantas consolas el espera que estén en el mercado en los próximos meses. Al final del año Jorgensen espera que haya entre 80 millones de consolas en los hogares, con unas ventas de 25 millones de PS4 y Xbox One (números combinados) que serían añadidas a los 55 millones de unidades colocadas actualmente