Una de las actividades que logro ser de gran interés en los videojuegos la generación pasada fue el parkour. Dicha disciplina física encajaba perfecto en varios títulos de acción que se desarrollarán en un sandbox al tener varias estructuras que podrías usar para desplazarte. Esto ayudó a los diseñadores a que sus polígonos cubiertos con texturas a los que llaman edificios, o construcciones como torres, fueran más que un simple adorno.

Videojuegos como Assassin’s Creed fue uno de los títulos que cimentaron las bases de cómo debía implementarse dicha mecánica. Sin embargo, Mirror’s Edge fue un golpe de originalidad a tal grado que hoy en día está convertido en uno de los juegos de culto de la séptima generación. Su refrescante propuesta que se salía de lo convencional dejó a más de uno pensando en el potencial de los juegos en primera persona (además de dejarnos mareados).

Grapping
La combinación de varios géneros que convergen en algo interesante y original

Siguiendo con esta misma línea de creatividad y exploración de elementos ya conocidos, tenemos a Welkin Road, primer título de Gregor Panič desarrollador de Eslovenia y publicado por Nkidu para Steam en PC.

Welkin Road es un título first person grappling platformer, o por lo menos así lo denomina su creador. Es alentador ver este tipo de juegos en donde vemos combinados varios elementos en una fórmula totalmente nueva, ya que se toma la perspectiva de primera persona con plataformas todo complementado con mecánicas de parkour y destreza.

No solo necesitarás reflejos para llegar a la línea de meta de cada escenario, hasta cierto punto algunos retos que te encontrarás necesitarán de tu ingenio y sentirás que el juego se convierte en resolución de puzles por algunos momentos.

El juego se desarrolla a través de varios niveles que van aumentando su dificultad, la curva de aprendizaje no se siente tan amable con usuarios sin experiencia previa, como Mirror’s Edge, aunque cumple al dejar pensar por sí mismo al usuario. También cuenta con un modo a contrarreloj para mejorar los tiempos en que logras pasar cada nivel.

Una de las problemáticas del juego es su control ya que no me parece de lo más preciso, lo cual causa conflictos al ser necesaria la exactitud en cada uno de tus movimientos para seguir avanzando. Estos casos se dan más seguido con unas pequeñas esferas de energía a las cuales nos encadenamos con ayuda de nuestros guantes. Dicho gancho se carga después de un tiempo.

Meta
En ocasiones el control es tu mayor enemigo

Pronto te encontrarás frustrado al ver como casi logras atravesar entre una plataforma y otra pero caíste al vacío por problemas en el control, que dicho sea de paso aún no da soporte para conectar un mando a tu computadora, por lo que puede que sufras de dolores en tu muñeca después de una larga sesión de juego presionando el teclado. Además se siente fatal que haciendo las maniobras que realizamos con nuestro avatar, no podamos colgarnos o sostenernos de las plataformas. Puede que haya sido una decisión de diseño para no romper los niveles, pero se siente como algo antinatural al igual que los saltos y carreras causados por el motor de física.

Otro gran problema es su aparente simpleza. Si bien terminar todos los niveles te llevará un buen rato, al cabo de terminar el tercer nivel te sentirás un poco desalentado por la nula variedad de ambientación. Es cierto que es un juego que exige dedicación y paciencia, pero la escasez de una trama y de variedad de escenarios harán que más de uno se aleje.

El juego cuenta con elementos interesantes que si hubieran sido bien complementados con más escenarios -o porqué no, hasta un modo historia- tendríamos un título mucho más sólido. El control aunque impreciso, cuando logras dominarlo y alcanzar la meta sentirás una satisfacción que muy pocos videojuegos te otorgan hoy en día.

Nivel
Tienes que utilizar todas tus maniobras para poder llegar a la meta

En el apartado gráfico el juego no destaca, aunque su misma naturaleza le niega elementos detallados o variables. La música cumple sin llegar a destacar.

Sería injusto calificar Welkin Road como un juego aburrido o mal diseñado. Puede que jugadores inexpertos o casuales le huyan a la frustración y a la nula historia que nos tiene acostumbrados la industria actual. Pero para jugadores que estén buscando un verdadero reto sin la necesidad de seguir un argumento y jugar por el simple hecho de divertirse y seguir mejorando, encontrarán una excelente alternativa.

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