Durante los últimos años, gracias a la llegada de Kickstarter y métodos Early Access como el usado por Steam, la escena de videojuegos indie ha ido en aumento. Esta nueva posibilidad de presentar proyectos sin requerir un presupuesto descomunal, ha traído nuevas experiencias artísticas y jugables al mercado.

Entre estas nuevas apuestas está Epistory, una historia cautivante de Fishing Cactus sobre una niña escritora que monta un zorro mágico de tres colas, perdida en un mundo de páginas. La niña necesita inspiración para seguir escribiendo y tendrá que recorrer el entorno para saber que le ha pasado con este universo de papel.

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Como todo juego de exploración en Epistory tendrás que viajar a través de paisajes y escenarios peligrosos. Sin embargo, la forma de pelear es por medio de palabras, el escribir es lo que te permitirá destruir o interactuar con el ambiente, al igual que atacar a tus oponentes.

Este juego utilizará casi todo tu teclado gracias a que la forma en la que atacaremos enemigos será escribiendo palabras que aparecen encima de ellos. Por muy tonto que suene esto para algunos, hace de cada “batalla” algo distinto y muy frenético en ocasiones.

Cada enemigom dependiendo de su poder, requerirá que escribas de una a cinco palabras, que aparecerán una tras otra mientras él se abalanza sobre ti para matarte. En lo que pude probar del juego enfrenté entre uno, cuatro o más enemigos aproximándose a la vez, por lo que escribir rápidamente es esencial.

Epistory

Los controles de Epistory están perfectamente diseñados para la escritura, e incluyen una variante del clásico WASD que te permite tener las dos manos posicionadas sobre la zona de las letras para escribir más rápido cuando sea necesario.

Conforme escribas y resuelvas puzles o mates enemigos, ganarás experiencia o “inspiración” que te permitirá subir de nivel y mejorar habilidades de tu personaje. Sea velocidad, la habilidad de tu zorro de moverse automáticamente, la posibilidad de destruir dos palabras al escribir sólo una, etc.

Con el tiempo y al avanzar en la historia obtendremos poderes que nos permitirán explorar más zonas del escenario para enfrentarnos a diferentes jefes o enemigos. En un par de ocasiones, al obtener un nuevo poder, tendrás que regresar a zonas previamente exploradas, pero nada grave.

Visualmente se muestra coherente y bastante hermoso, tanto los colores como el arte utilizado se mezclan perfectamente en una sinfonía visual impresionante. Todos los escenarios están hechos por paginas dobladas como origami y nuevas zonas se abren como páginas que se desdoblan como si se tratase de alguien imaginando al leer. Los escenarios serán desde bosques hermosos, desiertos brillantes, hasta cuevas llenas de lava.

Es también por medio de este estilo visual único que la historia se nos relatará, ya que extrañas escrituras nos narran lo que hacemos. Si jugaste Bastion, podrás recordar al narrador que nos decía que hacer y que hacíamos. En Epistory es la misma situación, pero en lugar de una voz serán letras que aparecen en el camino.

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Los efectos de sonido fueron consistentes durante la prueba que tuve y permiten sumergirse en este mundo rápidamente. La música es la que se lleva las palmas, con un trabajo excelente comparable con títulos como Journey, The Banner Saga o Braid en algunas melodías.

La historia se planea desarrollar en cuatro o cinco capítulos cada uno con una duración aproximada de 30 minutos a una hora dependiendo de que tanto te dediques a explorar cada rincón. Si estaban sorprendidos por la poca precisión con la que menciono la cantidad de capítulos en el juego, es porque Epistory se encuentra en Early Access y solo tiene 2 capítulos disponibles (que son los que probé).

Personalmente soy una persona que jamás entregaría su dinero a un trabajo “en progreso”, pero Epistory de verdad se encuentra muy bien realizado hasta ahora. Si decides entrar a su Early Access, te informo que los capítulos del juego todavía se siguen terminando, por lo que cada cierto tiempo se añade una parte más de la historia.

De igual forma, las mecánicas están dispuestas a cambios dependiendo de la opinión de la comunidad, y el juego ,aunque muy bien realizado hasta ahora, todavía tiene algunos errores técnicos. En mi prueba, cuatro veces el juego se congeló y cerró por su cuenta, y en una ocasión más mi Save Game se dañó y tuve que empezar de nuevo.

El combate también tiene el ligero problema de que tu personaje tiene un modo en el cual se mueve libremente pero no puedes escribir para atacar, y viceversa. Esto produce que todas las peleas se conviertan en defender tu colina o correr de ellos. Una situación que ya están viendo los desarrolladores como volverla más dinámica.

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En realidad es una experiencia única que probablemente no sea del agrado de todos debido a la diferencia que es el “machacar botones” aquí. La música y gráficos hacen de esta una aventura hermosa y bastante mágica. La jugabilidad es única y, dejando a un lado lo mucho que te pueda ayudar a mejorar tu habilidad de escritura, es un giro nuevo que pocas veces se ve en una industria inundada de shooters. Es verdad que en ocasiones puede ser ligeramente monótona pero ¿qué juego no lo es?

Lo importante de todo es percatarse que este es un titulo increíblemente solido incluso en su estado Early Access, y me atrevo a decir que en estos momentos ya justifica su costo de $139.99 MXN en Steam. Todavía hay que sumar que le faltan 3 episodios más por salir, nuevos modos de juego, más dificultades, tablas de líderes y múltiples finales dependiendo de tus acciones.

Si tienes una PC y amaste Braid, Journey, Bastion, The Banner Saga, Botanicula, Brothers A Tale Of Two Sons, Limbo o alguna más de todas estas apuestas en las que una buena narrativa, arte y gameplay pueden superar cualquier presupuesto multimillonario, debes probar Epistory. No solo estarías combatiendo una constante oleada de juegos genéricos, sino que apoyarías a un estudio a terminar una excelente aventura que promete mucho y hasta ahora ha cumplido.

Esa pequeña musa en su zorro desea saber en que termina la historia, y créeme que tú también.