Pocos saben que la primera película en la que apareció Elijah Wood fue Regreso al Futuro II, en la que interpretó a un pequeño que jugaba con un arcade. La mayoría lo recuerda por su papel en la trilogía del Señor de los Anillos, en donde interpretó al inolvidable Frodo Baggins (o Frodo Bolsón, en las versiones latinoamericana e hispana). A partir de ese momento, ha estado combatiendo por obtener papeles interesantes que lo saquen de la casilla en que se metió. Lo vimos como Kevin, en Sin City, y como Jonathan Safran Foer, en Todo Está Iluminado. Pero cada uno de los papeles siguientes, exceptuando su cameo en El hobbit: Un viaje inesperado, han sido entre regulares y francamente olvidables. En esta ocasión se nos presenta en Open Windows: Persecución Virtual junto a la ex-actriz porno y escritora de novelas eróticas Sasha Grey, una película de origen español, dirigida por Nacho Vigalondo (Los Cronocrímenes).
La base argumental de Open Windows nos muestra a Nick Chambers (Elijah Wood), un fan de la famosa actriz Jill Goddard (Sasha Grey), quien se encuentra alojado en un hotel porque supuestamente ha ganado un concurso y la oportunidad de tener un encuentro con ella, después de la presentación de su última película. Pronto recibe una llamada de una persona que se identifica como el webmaster del sitio oficial de Jill, informándole que la cena se ha cancelado. Todo podría haber terminado allí ¿están de acuerdo? Un fan defraudado por su estrella favorita, al grado que tiene un website dedicado enteramente a ella, y que debe regresar a casa con toda la tristeza del mundo. Pero esta voz comienza a mostrarle cosas, cosas que van cayendo rápidamente en la invasión a la privacidad de la estrella, enredando a Nick en el proceso. Unas cuantas órdenes, con la sola intención de divertirse a costa de ella, van transformándose en un caso de hacking, acoso y más.
No les quepa duda que el guión plantea algo interesante. ¿Qué pasaría si un hacker no ético -es decir, un criminal cibernético- tuviera el control de cada dispositivo y cada cámara ubicados en los domicilios de sus víctimas, y si además pudiera controlar algunos otros artefactos de seguridad pública? No es algo nuevo, eso es seguro. Ahí tenemos Watch Dogs, un videojuego relativamente bueno que se vuelve muy repetitivo con el tiempo, que no logra enganchar, y por lo cual perdió muchos puntos en la comunidad gamer. Sin embargo, el tema es bueno.
El problema es la forma en que fue estructurado y puesto en acción. Y creo que los grandes errores caen básicamente en, uno, la baratísima actuación que ofrece Sasha Grey (personalmente, le he visto más emoción en sus filmes porno), que no convence y nos hace preguntarnos qué hace una ex-actriz porno en el cine y cómo es que conoció al director; dos, el mal trabajo de dirección que nos muestra que Vigalondo no tuvo el coraje necesario para exigirle entrega a todos los actores (el único que destaca es Elijah, nadie más), y tres, el formato, que nos confunde más de lo que nos intriga, y por consecuencia, habrán muchas personas que sinceramente no entiendan qué es lo que intentaba trasmitir el director con una película carente de propósito -otro que no sea ganar dinero-, en donde el hacker real sorprende al final, pero no nos explica cómo es que supo todo desde antes que ocurriera con tanto detalle. Simplemente es increíble, en el mal sentido de la palabra.
Los efectos y la música, no demeritan. Los escenarios fueron buenos. Y como he dicho, lo más destacable es el papel de Elijah, aunque el mismo no sea creíble en el desenlace (eso, vaya, no es problema del actor, sino del guión). Sasha tendría que centrarse, en mi opinión, en seguir escribiendo novelas eróticas, porque lo suyo, lo suyo, no es la actuación… a menos de que hablemos del cine porno. Entonces sí, ahí no les discuto absolutamente nada. Le doy un seis. Película súper palomera, no vale la pena verla en el cine.