Hace 35 años George Miller lanzó una película de bajo presupuesto en su país que se convertiría en un éxito inesperado, Mad Max, donde un policia en un mundo post-apocalíptico llamado Max Rockatansky, interpretado por un aún desconocido Mel Gibson, intentaba buscar la paz en su familia mientras enfrentaba a peligrosos pandilleros en la carretera.
El éxito de la cinta llevó a Miller a dirigir a Gibson en Mad Max: El Guerrero de la Carretera que consolidó el éxito de la franquicia y la fama del actor australiano al mostrarnos una trepidante historia llena de violencia y persecusión en las llanuras australianas en épicas batallas por conseguir la escasa gasolina que había en un contenedor. Finalmente tuvimos Mad Max: Bajo El Domo de Trueno donde Max intenta llevar a unos niños a un lugar más propicio para sobrevivir mientras son perseguidos por una peligrosa oligarquía.
Esto nos lleva a la cuarta entrega, Furia en el Camino, donde otro actor australiano, Ben Hardy, toma el lugar que dejó vacante Mel Gibson y ahora Max unirá fuerzas con una mujer llamada Furiosa (Charlize Theron) con el objeto de atravesar nuevamente las peligrosas llanuras australianas, plagadas de temibles pandillas que ansían el combustible, las mujeres y la sangre.
Es un buen día para ver una vez mas a Max Rockatansky de las primeras cintas en acción, ¿no creen?
Mad Max: Furia en el Camino llega en mayo del 2015 a los cines de nuestro país.