Ha pasado apenas un año desde el lanzamiento de Tom Clancy’s The Division 2 y no creo que haya mejor forma para celebrarlo que con una gran expansión para traerle nueva vida al título.

Dentro del juego tan solo ha pasado medio año desde que Aaron Keener desapareció durante la escena final del primer título, y esta vez regresó para terminar lo que empezó, comenzando por retomar el control de Nueva York con ayuda de una nueva arma biológica que creó a partir del virus que originó todo.

Es nuestra misión como agentes de The Division el detener de una vez por todas a Aaron Keener con ayuda de viejos conocidos como Faye Lau, quien se ha recuperado y está de vuelta en acción, y Paul Rhodes, entre otros.

Quisiera comenzar con las únicas dos cosas que no me gustaron de la expansión, para después comenzar a hablar sobre todo lo que Ubisoft si hizo bien. La primera es que no entiendo porque tardamos tanto en regresar a perseguir a quien inició todo después de que la primera entrega de The Division terminara con un dejo de frustración al ver como Aaron Keener se escapaba de entre nuestros dedos y no podíamos continuar su búsqueda sin dejar desprotegida a los sobrevivientes de Nueva York. Después de esto llegamos a Washington y seguimos sin tener noticias de quien fue el principal antagonista del primer título, y es hasta esta última expansión que conocemos un poco más sobre lo sucedido.

El segundo punto si afecta más al juego, y es que con la expansión regresan las temibles esponjas de balas que caracterizaron a Tom Clancy’s The Division. Uno de los principales problemas del título anterior es que los enemigos podían soportar una gran cantidad de ataques, y con el tiempo esto se volvía tedioso al tener que hacer misiones en dificultades mayores que incrementaban aun más la vida de los enemigos. The Division 2 resuelve este problema en el juego base y entrega una buena experiencia al fijarse en lo que había hecho mal con la entrega anterior, pero parece ser que con la expansión y el regreso a Nueva York regresamos también a los problemas del primer título. Hay una gran cantidad de enemigos en el juego que cuentan con escudos y armaduras y se vuelve demasiado molesto el pelear constantemente con ellos comparando la facilidad con la que ellos te matan a la cantidad de balas que necesita un equipo entero para matar a dichos enemigos.

Fuera de esto Ubisoft hace un gran trabajo con el regreso a Nueva York, comenzando por la historia que nos presenta cuatro agentes que se han aliado con Aaron Keener, cada uno con una especialidad diferente. A través de ECHO y platicas que encontramos en el mapa podremos descubrir más sobre la forma de trabajar de cada uno de los agentes y cual es su pasado, dándonos más motivos para verlos como un enemigo y querer terminar de una vez por todas con ellos.

A pesar de que las misiones para encontrar y derrotar a cada uno de estos agentes son cortas, el hecho de que cada enemigo y región tenga su propia dinámica lo hace más entretenido, además de que te va preparando para la batalla final con cada jefe. Aunado a esto, las batallas con cada agente enemigo siguen el modelo tradicional de pelea por etapas y cada uno cuenta con movimientos y tecnología característicos, por lo que el juego se sigue sintiendo fresco con esta nueva expansión.

El otro gran punto de admirar es todo el cambio que llego al modelo RPG con el que trabaja The Division 2, y es que, aunque la expansión agregó contenido extra para los jugadores que la adquieran, la actualización también trajo buenas cosas para los jugadores que aun están decidiendo si comprar o no la expansión. Comenzando por el sistema de estadísticas de las armas y la nueva estación de recalibrado, ahora podemos “guardar” las características del equipamiento obtenido para después dárselas a equipo que obtengamos más adelante, es decir que si tenemos un bonus máximo en alguna arma o una habilidad la podemos guardar para después ponerla en un arma y así mejorar sus atributos. Con esto, Ubisoft trae de vuelta los “God Rolls” al juego, cosa que a los grandes fanáticos de los RPG les encantará ya que podrán iniciar su búsqueda por el equipo perfecto. Además, ahora podrás buscar alguna pieza en específico con tan solo ver la región del mapa en la que te encuentras, por lo que si necesitas rodilleras o casco puedes simplemente quedarte en una zona a buscarlo.

Si a esto le sumamos el buen diseño de nivel que ha tenido The Division en ambas entregas, el desarrollo de historia que ha manejado hasta ahora, el sistema de combate y la variedad de enemigos que nos da al regresar a Nueva York, y la gran jugabilidad para multijugador que ha caracterizado a la serie, entonces tenemos que Warlords of New York es una gran expansión para inyectarle nueva vida al título y que gustará a los apasionados por los RPG y a los fanáticos de los juegos de disparos.

Por ahora solo queda una duda, y es ver cual será el camino que tomará el título con la historia que se ha desarrollado.