Aún recuerdo un segmento de mi infancia donde prendíamos la televisión los domingos para ver el programa Disneylandia, que era un programa que combinaba segmentos animados de las caricaturas clásicas de Disney, algunas películas o miniseries o hasta documentales.

Un día la programación cambió y Disneylandia fue reemplazado por la compilación de caricaturas clásicas de media hora, Mickey y Donald, y el otro segmento fue ocupado por la caricatura PatoAventuras, que, desde el momento de escuchar la canción de introducción, me atrapó. De ahí tuvimos varios años viendo las aventuras de Rico MacPato y sus sobrinos, mientras llegaban otras series como Aventureros del Aire, Chip y Dale: Al Rescate y El Pato Darkwing. Del éxito de estas caricaturas, Disney encontró que sería bueno intentar algo nuevo en un mercado que estaba creciendo con velocidad: los videojuegos.

De ahí que de una alianza entre Disney y Capcom salieron varios videojuegos basados en sus series y películas y, entonces nos llega a nuestras manos The Disney Afternoon Collection, una colección de seis juegos de esa época compilados por Digital Eclipse y que lo pueden encontrar en la Xbox One, Playstation 4 y Steam.

Diversión, reto y una gran banda sonora, DuckTales fue uno de los mejores juegos del NES.

MUCHAS AVENTURAS HAY EN PATO… LANDIA…

The Disney Afternoon Collection contiene seis juegos de la época del NES de esa alianza que tuvo Disney con Capcom entre 1989 y 1993 y que comprende los siguientes juegos:

  • DuckTales (1989) y DuckTales 2 (1993) nos permite controlar al Tio Rico McPato en sus diferentes aventuras para poder lograr acrecentar su fortuna y convertirse en el pato más rico del mundo (y no precisamente por su sabor), con la ayuda de sus sobrinos y sus aliados Rosita y Joe McQuack. En el camino deberá enfrentar a sus archienemigos como los Chicos Malos, Magica de Spell y otros tantos enemigos que querrán también quedarse con el dinero que busca el pato más ambicioso del mundo.
  • Chip & Dale: Rescue Rangers (1990) y su secuela de 1993 nos permiten controlar a Chip, a Dale, o a ambos al mismo tiempo gracias a su modo para dos jugadores en una aventura para evitar que el malvado gato Malacara tome control de la ciudad, claro, no sin una ayuda del resto de los Rescue Rangers: Monterey Jack, Gadget y Zipper, en un juego que combinaba un poco del estilo de Super Mario Bros 2 y Metal Gear, pero sin perder el toque de sencillez para acercarse al público joven a jugarlo.
Si peligro hay, hay que llamar a los héroes sin temor…
  • TaleSpin (1991) nos permite controlar el avión del Oso Baloo para llevar la carga de sus productos al cliente correcto mientras trata de evitar que los Piratas del Aire lo derriben. Un juego bastante complicado donde deberás usar tu cañón para evitar diferentes obstáculos y donde tu pericia con el control es determinante para acabar el juego.
  • Darkwing Duck (1992) nos cuenta las aventuras de este encapuchado y gracioso justiciero quien, al lado de Joe McQuack buscan resolver una serie de misteriosos crímenes en Canard City con un juego de plataforma y disparos que nos permitirá evitar peligrosos obstáculos y a los supercriminales más peligrosos de la ciudad.

Cada uno de los juegos es un port directo de los juegos que jugamos en el NES en ese entonces, a los que prácticamente no les hicieron ningún cambio importante en cuanto al juego que llegamos a jugar en la consola, no veremos una mejora en cuanto a los controles del juego o a la música o gráficos como le ocurrió a la versión remasterizada de DuckTales en el 2013.

En cambio, vemos algunas mejoras agregadas indirectamente al juego como la capacidad de «rebobinar» el juego para corregir los movimientos que nos pudieron llevar a fracasar en un nivel (cabe mencionar que, como buenos juegos del NES, carecen de guardado automático y algunos de ellos tenían los continues, entonces el rebobinado puede ser bastante útil) y, a través de un menú exterior, podemos guardar los avances de un juego para continuarlo más tarde.

«..sale de las sombras, peleando como un león!…»

Además, como se ha dado en otras adaptaciones de juegos de Capcom a las consolas más recientes, podemos ajustar el tamaño de la pantalla para que el juego abarque toda la pantalla o tome un formato adecuado para que la visibilidad no estorbe al jugador. Cabe mencionar que el ajuste en la pantalla si afecta mucho en la visibilidad y hasta hace que el frame-rate se caiga, y definitivamente queda mejor en el formato definido por los desarrolladores. ¿Otro tip?, quiten el fondo y la visibilidad mejora, pues el fondo, emulando las portadas de los juegos, distrae un poco.

Cada juego cuenta además con dos opciones adicionales: una que te permite jugar el juego en un modo speed run que nos permite tomar los mejores tiempos para acabar un juego con un logro si lo haces en dos horas y uno que te permite jugar contra todos los jefes que tiene el juego y sacar el mejor tiempo posible para vencerlos.

TODA LA NOSTALGIA DE DISNEY EN UNA GRAN COMPILACIÓN

Esta compilación es apta para todo el público, para los que jugamos de niños o adolescentes estos juegos esta el aliciente de tratar de terminarlos como lo hicimos en el NES, de una sola sentada, usando ya sea el stick o el game pad (siendo más efectivo el game pad en esta ocasión) y de superar los retos de speed run y jefes contrarreloj.

TaleSpin siempre fue el juego más dificil de los que hizo Capcom para Disney

Los novatos o los jugadores casuales, encontrarán en el rebobinado y en la opción de guardar, las posibilidades de jugar estos juegos un rato y retomarlos después sin sentir la frustración de no poder acabarlo adecuadamente, como podría ser el jugar TaleSpin o DuckTales 2 que tuvieron una dificultad algo frustrante para cualquier audiencia.

Pero también tenemos algunos extras, como varias galerías de imágenes, en todo el proceso de desarrollo y promoción de los juegos, imágenes promocionales que salieron en las revistas de la época y tomas de los comerciales que hizo Capcom en Japón para estos juegos, así como algunas imágenes curiosas y trivias que están bastante interesantes.

Lo más atesorable es su galería de música, pues la galería tiene las bandas sonoras de cada uno de los juegos, para poderlos reproducir de manera continua, así que si lo tuyo era escuchar esa hermosa pieza que era el tema de la Luna de DuckTales, lo podrás escuchar sin preocuparte por enfrentar uno de los niveles más dificiles (y memorables) de DuckTales o revivir en sonidos MIDI de 8bit, los intros de tus caricaturas favoritas.

Justo en la nostalgia…

Quizá el mayor problema con el juego sea con las traducciones que se basan más en el español castellano que en el latinoamericano, de ahí que Rico McPato sea Gilito McPato y a la ardillita Dale se le termine llamando Chop, pero esto solo se ve en las galerías del juego, los juegos están completamente en inglés y sí, puede ser un poco molesto para quienes no dominan el idioma, aunque, los que los jugamos en ese entonces no nos preocupábamos de esos detalles.

No podemos decir que todos los juegos de esta compilación son buenos (no fui fan de Los Aventureros del Aire y el juego es muy difícil), pero, apelando a la nostalgia, y al hecho de tener una enésima oportunidad para vencer por fin DuckTales, sin remasterización alguna, hace que The Disney Afternoon Collection se convierta en una gran adquisición para el jugador de vieja escuela, así como una excelente herramienta para educar a los jugadores de ahora de lo que realmente era un juego dirigido para niños que entretenía a los grandes.

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