Hace cerca de seis meses, pudimos disfrutar del título de Summer in Mara, título que se lanzo en la plataforma de steam, pero recientemente hizo su llegada para las consolas de actual/vieja generación, y nos dimos la oportunidad de jugarlo en el Xbox One.
Los juegos de granja y gestión han tenido dignos representantes y afortunadamente, siguen en boca de la fanaticada, es aquí donde Summer i Mara quiere hacerse un pequeño hueco, presentando una historia centrada en una pequeña que debe cuidar su propia isla, haciendo una mezcla de crafting, granjas y demás
Esta granja esta a cargo de la pequeña Koa, quien tiene una pequeña isla, su madre que es un tipo molusco, desaparece con el paso del tiempo, no sin antes enseñarte todo lo bueno y como cuidar de una isla, pero a Koa le llama más la atención surcar los mares y conocer todo el archipiélago a su alrededor, pero no es tarea sencilla, ya que no debe descuidar sus tareas diarias, que van desde sembrar, crear herramientas, alimentarse, navegar y conocer mucha gente.
Visualmente, Summer in Mara tiene una paleta de colores bastante llamativa, algo similar a lo realizado en su momento con Zelda: Wind Waker, dándole toques caricaturescos, que se presentan en todo momento, ya sea en los artes cuando los personajes interactúan en conversaciones, o en las pequeñas animaciones que presenta el juego, de ahí se nota una labor un poco mayor al de la media.
Summer in Mara cuenta con un ciclado de día y noche, por lo que deberás gestionar tu tiempo para realizar tus actividades predilectas, el juego no te abandona al guiarte, ya que cuenta con un tutorial, asimismo te darán misiones o tareas específicas para avanzar en la historia, esto último rompe un poco en el sentido de libertad, pero no te cuarta en ningún momento.
Las actividades son varias, podrás pescar con minijuegos, cultivar plantas, recolectar ítems en la playa, plantar árboles, regarlos o cuidar d ellos animales, actividades ya clásicas de los juegos de granja, sin embargo, no son tan variadas como en otros títulos. Las quest te guiarán a que paulatinamente obtengas nuevos ítems y sus distintos usos y mejoras, por lo que, al explorar simplemente aumentarás los recursos e ítems a tu disposición, pero estas limitado a las quest que debas ir realizando, son un total de 300, pero todas se basan en hacer o traer un encargo, por lo que estarás yendo de aquí para ala más a enfocarte a tener la mejor isla.
Una ventaja/desventaja es que, si bien el juego pasa los días, no están calendarizados o forzados a que hagas una actividad en determinado día/tiempo, por lo que puedes ir avanzando a tu ritmo, y no tienes que sufrir por el paso de las estaciones o años.
Summer in Mara implementa la opción de descanso y comida, por lo que, en teoría, no puedes hacer muchas acciones sin estos dos insumos, sin embargo, el no comer o dormir solo te impacta en que tu personaje se mueva lentamente, por lo que no tiene penalizaciones graves, como no tener un día de trabajo o enfermar. Asimismo, las cosechas si no las riegas o cuidas, no hay una penalización fuerte, de hecho, puedes pasarte las noches durmiendo y florecerán los insumos sin un mayor trabajo.
Como un paréntesis, aplaudo el concepto que manejan de valores y agradecimiento con la madre naturaleza, ya que al talar los arboles te dan una semilla con la cual puedes volver a sembrar, asimismo en los diálogos de los personajes hacen hincapié de agradecer a la madre naturaleza por todo lo que se nos ofrece.
Dentro de los problemas pueden ser las altas expectativas que uno puede esperar del juego, por ejemplo, la navegación no agrega ningún valor especial en el gameplay, si puedes visitar otras islas, pero simplemente es un valor mas de movimiento, en donde la gasolina es infinita y no pasa nada relevante en el mar (Tomando en cuenta las ansias que nos transmite Koa por estar en el mar, realmente es una aventura solitaria).
Otro problema son las tareas dentro de tu isla, conforme progreses te veras en la repetición, de plantar, talar un poco, pescar y listo, preferirás pasarte durmiendo para que se dé el tiempo necesario para que puedas levantar la siembra, asimismo en una situación no del todo agradable es que el agua potable es limitada, y un pozo tiene pocas ocasiones para que te de agua y tendrás que esperar a que llueva para que se llene… o construir un nuevo pozo que misteriosamente tiene agua, así que me la pasaba creando y destruyendo pozos para crear agua.
Finalmente otro problema es el objetivo per se del juego, no esta del todo claro que es nuestro móvil, por ejemplo, Koa quiere navegar, pero nos enfrascamos en la isla para obtener dinero que no es tan demandante como otros juegos, la salud o cansancio se puede remediar fácilmente con las naranjas de los árboles que día a día aparecen, por lo que ni es necesario hacer todas las recetas, la exploración que te vende el juego es limitada, un mar abierto vacío y con islas en donde no puedes visitar los edificios y esta vacía, sin movimiento de los NPC, por lo que desentona el ánimo y calor visual con la experiencia que se tiene en el mundo.
En el apartado musical, es extraño, ya que cuenta con melodías tranquilas, pero habrá ocasiones en donde no se reproduce ninguna melodía y estarás en silencio, asimismo faltaría más efectos de sonido, de gaviotas, el oleaje y así, en donde te sintieras en el mar o la playa.
El juego es extenso, te durará cerca de 20-30 horas terminarlo en un 100% por lo que en valor costo/durabilidad si le hace justicia.
