Combinar animación y actuaciones liveaction es un reto enorme, sobretodo cuando esto implica que el personaje principal de la historia es un personaje animado por cualquier medio, tenemos momentos exitosos como Roger Rabbit, Casper o Scobby Doo (ambos en su primera cinta) y momentos desastrosos como El Oso Yogui, Dibu (bien en la telenovela, horrible en la película), Alvin o El Pájaro Loco (tanta atención llamó que se fue directo a video en Estados Unidos).

Y de pronto en el 2014 tuvimos una de esas extrañas excepciones en el caso de Paddington, una adorable cinta que logra darle vida al osito de los libros de Michael Bond, la cual, aunada a un excelente reparto con fuerte experiencia en cintas de fantasía y una historia fácilmente masticable por una audiencia que puede ir de los 6 a los 99 años, se convirtió en una gran sorpresa en el Reino Unido, Estados Unidos y hasta en México.

Unos años después y, superando incluso el escándalo Weinstein (el cual lo obligó a cambiar de distribuidora en nuestro país), tenemos Paddington 2, el cual mantiene ese gran reparto que destacó en la primera cinta en la cual tenemos a HughBonneville, Sally Hawkins, JulieWalters, JimBroadbent, Peter Capaldi y las voces de Ben Whishaw, Imelda Staunton y Michael Gambon; además de que se agregan BrendanGleeson y HughGrant en la cinta dirigida por Paul King y producida por David Heyman.

 

Paddington tiene una ilusión y hará lo que sea por conseguirlo… honestamente.

Ya bien establecido con la familia Brown  en Windsor Gardens, el osito Paddington busca el regalo perfecto para la tía Lucy, mismo que encuentra en un hermoso libro ilustrado que encuentra en una tienda de antigüedades. Mientras realiza todo tipo de trabajos para poder comprar el libro, este es robado y todo apunta a que el único responsable es Paddington, no obstante, mientras el osito intenta sobrevivir a la cárcel y limpiar su nombre, los Browns, intentarán superar sus problemas personales para poder descubrir al ladrón y liberar al osito.

Y todo lo que puedo decir de la película es una palabra: ADORABLE.

No es adorable solamente porque me haya encantado ver otra vez al osito Paddington, quien es nuevamente animado casi a la perfección, con ese tono inocente y curioso que imprimen sus ojos, bueno, excepto en una escena clave de la historia, y que en todo momento nos muestra a este osito capaz de pensar, temer, sentir, reír, llorar y hasta enojarse. Aunado con la voz delicada y educada que le pone su nuevo actor de doblaje, tenemos a un osito casi perfecto (si, nunca he podido escuchar a Whishaw en las cintas en inglés pero me imagino ese tonito de voz) que realmente podría ser uno de los mejores animados por computadora de la historia del cine, quizá solo detrás del formidable Ceasar del Planeta de los Simios.

No es adorable solamente por ver una historia que destila azúcar en toda la historia, de ver cómo este simpático osito hace de Windsor Gardens el vecindario perfecto, de una cárcel con los peores criminales el lugar más dulce del planeta (literalmente) y de mostrar cómo se aprovecha cada actor del elenco, donde hasta el personaje más insignificante tiene un peso pequeñito en la trama y no se sienta como un cameo inútil.

 

No importan las dificultades siempre estará la familia para apoyarlo.

Y entre sándwiches de mermelada de naranja (si no es de naranja la mermelada en el Reino Unido es una simple jalea) y una excelente producción que nos muestra diferentes puntos de Londres tanto de manera real como de manera primorosamente animada, vamos entreviendo una historia que no busca desacelerar la historia, excepto cuando es realmente necesario ir a buscar un pañuelo o tenemos que recuperar el aire de tantas risas provocadas.

De ahí tenemos la justificación del por qué su guión tiene una nominación al BAFTA, si, compitiendo contra cintas como Llámame por tu Nombre o Apuesta Maestra. Pese a la sencillez de su guión, la historia es bien aprovechada y cada personaje que aparece está perfectamente retratado y tiene sus causas y razones y, curiosamente, no sentimos que perdamos el tiempo en ello.

Y el elenco actoral, que ya se siente como pez en el agua con sus personajes, logra apoyar bien cada escena donde vemos a Paddington, actores que han tenido experiencia en cintas de Harry Potter como JulieWalters, JimBroadbent o Imelda Stauton u otros que han destacado de una u otra manera en la fantasía como Sally Hawkins o el Décimo Doctor WhoJimCapaldi. Y si de ahí todavía agregamos dos nuevos elementos que realmente le dan mucha fuerza al elenco, terminamos disfrutando más.

 

Hugh Grant no vive de sus viejas glorias, se divierte con ellas.

De un lado tenemos a BrendanGlesson (otro veterano de Harry Potter), quien hace a un rudo cocinero de la cárcel quien, sin perder el tono fuerte de su voz, va enterneciéndose por la forma de ser de Paddington y se va tornando uno de esos rudos adorables que a veces destacan en las películas infantiles.

Pero quien se roba el show es HughGrant, quien de pronto hace una parodia de sí mismo y lo adereza con elementos teatrales bastante ridículos para darnos un villano que se torna bastante disfrutable en medio del patetismo y motivación del personaje, todo un maestro del disfraz y lleno de diferentes características que lo hacen sumamente risible y aceptable por todo el público, incluso podría decir que su escena post-créditos es tan buena que podría robarle el BAFTA a Sam Rockwell si se lo propone.

El doblaje tiene cambios significativos debido al cambio de distribuidor (ahora es LATAM Films el distribuidor de la cinta), pero el impacto no es nada grave donde vemos que el elenco está completamente limpio de star-talent y los actores de doblaje hicieron su mejor esfuerzo para que se adaptaran bien los chistes británicos al español, esto además de que la voz deJose Antonio Macías se adapta bien a Paddington, pero quien se roba el espectáculo es Rubén Cerda quien logra traducir perfectamente al español el talento deHughGrant. Aunque, debo insistir, me gustaría ver la cinta en su idioma original.

 

No se necesita mucha paciencia para divertirse con esta película.

La banda sonora de la película es encantadora y es divertido ver como hasta llega a interactuar de alguna manera con la película al estilo Loco por Mary (con todo y banda en vivo tocando, un pequeño gag que también traía la primera película), sabe acompañar bien los momentos alegres, tristes e intensos que tiene la cinta.

Si,va a sonar difícil que Paddington logre uno de los tres BAFTA por los que compite en las próximas semanas, pero ya conquistó el corazón de los británicos y deja mucho deseo de poder sintonizar la BBC y poder ver de menos un episodio de la serie clásica de los setenta. Si, Paddington no sabe envejecer y eso es bueno para una audiencia que espera más historias del osito británico en el futuro. Solo desearía que alguien en México pudiera distribuir muñecos o juguetes de la película.

[marstheme_review post_id=»146422″]