Una vez más Bandai Namco viene a sacar un nuevo juego de plataformas/aventura de la mascota predilecta de la compañía y vuelve a mutilarla en el proceso.  Pac-Man nunca ha servido realmente como un personaje, pues todos los intentos de darle una personalidad han tenido resultados muy malos. Será más viejo que Mario, pero éste siempre ha tenido carisma y Nintendo logró armar un personaje alrededor de un plomero que rescataba a su chica de un simio. Pac-Man siempre estuvo ahí, pero no había razón para decir por qué estaba en un laberinto atrapado con cuatro fantasmas que lo podían matar.  Se ha hecho prácticamente de todo, desde un juego de plataformas a un clon de Mario Party, pero en general ha fracasado y cada nueva revisión en el diseño del personaje hace que Pac-Man se vuelva más una cosa rara que un personaje de videojuego.

Probablemente los mejores juegos de Pac-Man que se han hecho desde el original y Ms. Pac-Man son Pac-Man VS para el GameCube (que creó Shigeru Miyamoto) y los Pac-Man: Championship Edition (cortesía de Toru Iwatani, el creador de Pac-Man), ya que tiraron por la ventana el concepto de Pac-Man como personaje y se enfocaron en ver qué hacía de bueno al arcade original y cómo podrían hacerlos mejor.  No obstante, Bandai Namco no se va a rendir con su otra propuesta, y esto nos lleva a la secuela de Pac-Man and the Ghostly Adventures.

Este juego de plataformas, que acompaña a la serie de televisión del mismo nombre, trata de Pac-Man y sus aventuras deteniendo a los fantasmas de invadir su mundo.  Pac-Man tiene una voz y personalidad más atroz que Sonic cuando intenta hacerse pasar como chico cool, pero al menos el resto de los personajes no están tan mal; ademas, el juego tiene un tono muy enfocado a un público infantil que lo disfrutará, aunque temporalmente.  Para acomodar esto, el propio gameplay es muy simple, al grado que con tal de oprimir los botones básicos de ataque puedes vencer hasta los enemigos mas difíciles, creando una falta de reto muy notoria y hasta adversa para el entretenimiento de un juego infantil, es interesante que todos los ataques de Pac-Man emulen una animación de comer similar a la del original, y lo mismo ocurre con los power-ups (y hablando de estos, no son muy originales y son «gimmicks» que son usados solo cuando el juego te lo pide), tan fuerte es esta emulación que los niveles tienen paredes invisibles que te impiden explorarlos de manera libre y que tengas que recorrer un laberinto muy lineal.  Ignoro si esto es autoreferencia o mala programación y diseño de niveles.

El nuevo diseño de Pac-Man hacen que se vea mas humano, que irónicamente lo hace ver menos humano y más como una cosa horrorosa que no debió existir.

El verdadero problema con Pac-Man and the Ghostly Adventures 2 es su fuerte dependencia a la primera parte; esta «secuela» es realmente una extensión del primer juego que podrían haber sido varios DLC  (en el caso en el que juegas con otros personajes que no son el protagonista, es altamente notorio).  Los propios niveles, aunque coloridos, carecen de reto y de un diseño pobre al que solo le faltan letreros para indicar a dónde tienes que ir.  Las referencias a la serie desde sus inicios y en general a la historia de Namco son bien apreciados, pero lamentablemente estos también venían en el primero y se sienten algo gastados.  La música pasa sin pena ni gloria y lo más probable es que no te acuerdes de ella.

Bandai-Namco se une a Sega en la lista de desarrolladores japoneses que empiezan a dejar sus franquicias emblemáticas en manos de occidentales en un esfuerzo de mantenerlos relevantes y vender más, pero si esto no resulta en un buen juego que hasta un niño de 7 años puede apreciar, entonces no se seguirán vendiendo y el ciclo seguirá hasta que encuentren una mejor opción. Hacer un juego infantil no es fácil, los chicos de Rare eran particularmente buenos para vender un juego para niños y para personas más grandes, ya que buscaban hacerlo divertido, con referencias de cultura pop (como en las caricaturas de los 90s) y un tono que nunca entraba en lo desesperante.  A los encargados de este juego lo mejor que les puedo decir es que jueguen esos juegos y busquen meterlos en un juego de Pac-Man como éste, y a Bandai-Namco, que se esfuercen más en cuidar a su personaje o que hagan más juegos como el Championship Edition.