Null Drifter, desarrollado por Panda Indie Studio, es un título shooter de vista aérea, con un arte minimalista, a tal grado que solo se ocupa un solo bit, como si utilizáramos ordenadores de antaño. El juego cuenta con varias paletas desbloqueables, con patrones distintos de colores binarios los cuales no añaden un gran valor, ya que siempre contaremos con dos colores distintos, y eso apela más a cuál moleste menos a tus ojos.
Null Drifter salió hace tiempo para el Switch pero en esta ocasión podremos disfrutarlos en el XONE.
Controlaremos a una nave espacial, la cual tiene solo tres movimientos esenciales: moverse, disparar con el stick, y realizar un dash. Los enemigos irán apareciendo en los costados de la pantalla, con un símbolo de warning sabrás de donde aparecerán. Estos encuentros son al azar, por lo que no siempre aparecerán los mismos enemigos.
La variedad de enemigos y sus tipos de disparos es muy escueta, no superarán a la decena, por lo que después de un par de partidas conocerás el patrón de cada uno: Algunos tendrás que derrotarlos y otros será mejor optar por esquivar sus disparos por medio del dash, este último te dotará unos segundos de invisibilidad por lo que estarás ocupando esta herramienta más de lo pensado.
En el escenario aparecerán distintos powerups que te ayudarán en tu travesía: ya sean vidas extra, mejora de arma, rapidez de movimiento entre otras. Asimismo, cada vez que derrotes a un enemigo, podrás recolectar monedas, estas serán de vital importancia, ya que es muy probable que perezcas en los primeros mundos del juego, cada vez que pierdes se guardarán todas las monedas utilizadas, con ellas podrás comprar mejoras permanentes o algunas que solo aplicarán en tu siguiente partida, proveyéndote de más vidas y mejores armas, por ende, entre más juegues, más fácil será que avances por los escenarios.
Al final de cada escenario te encontrarás con un jefe final, los cuales tendrás que tener cuidado de los patrones que tienen y memorizarlos, estos serán más grandes y agresivos, empezando a saturar la pantalla de disparos.
Un problema de Null Drifter es la dificultad, ya que más allá del nivel 6 el juego se complica demasiado, pero no por falta de habilidad o por la aparición de enemigos mas complejos, sino porque se te saturarán de enemigos la pantalla y estos dispararán más rápidamente, por lo que perderás por “amontonamiento” de disparos, lo cual no se siente justo y terminarás optando por levelear tu aeronave al máximo y empezando a caer en la rutina.
La carencia de modos de juego hace que simplemente te enfoques en lo antes mencionado, por lo que el juego no es algo que sea muy longevo, tanto por el factor diversión, que no es esta presente, como el valor de juego en sí.
En el apartado sonoro son solo un par de bits sonoros apelando a aquella época de antaño.
Para los cazadores de logros / trofeos, les agradará saber que podrán obtener todos en menos de una hora, dependiendo de sus habilidades innatas.
