Cuando una película es un gran éxito taquillero está claro que va a dejar un legado que buscará ser imitado, pero una cosa es cierta, nunca será igualado. En el caso de Llamando a Ecco, dirigida por Dave Green, la cinta intenta hacer una versión actualizada de E.T. El Extraterrestre, pero con toques de otras cintas como Los Goonies y El Proyecto de la Bruja de Blair, agregando la influencia del uso de las aplicaciones web.
Alex, Tuck y Munch son tres amigos de mucho tiempo que ven su amistad a punto de terminar cuando una gran construcción amenaza con arrasar con el vecindario donde viven. Resignados a la idea, deciden seguir una extraña señal que ha aparecido en algunos teléfonos celulares, sin saber que esto los llevará a conocer a una simpática criatura alienígena que llamarán Ecco, quien los acompañará en una búsqueda por la región donde viven para poder armar la nave que lleve a Ecco a casa, claro, el gobierno también lo sabe y quiere evitar que la aventura sea completada.
Manejando un formato «found footage», la cinta nos lleva por la cámara de Tuck, un aficionado a grabar todo lo que le rodea y subirlo a las redes sociales, lo cual nos permite ver diferentes tomas que siguen a los personajes del filme, desde las cámaras de los celulares hasta una videocámara HD, pasando por gadgets como los GoPro y los lentes de espía. Esto genera desconcierto al inicio del filme al notarse una edición forzada y muy basada en las redes sociales que hace difícil masticar el contexto de la cinta, pero cuando poco a poco la cámara principal toma algo de protagonismo, la historia toma cierta congruencia. No obstante, como cualquier película de found footage, vamos a encontrar cámaras movidas, pérdidas de señal, tomas a la nada y ese tipo de detalles que, afortunadamente, no causan mareos.
En cuanto a la trama, podemos afirmar que si vieron las cintas que mencioné arriba e incluso Super 8 de J.J. Abrams, entonces podrían ahorrarse la vuelta al cine. Si bien la historia conmueve al tomar un poco de esa nostalgia que transmite la partida de un lugar como ocurrió en Los Goonies, los personajes no generan simpatía como los de aquella cinta. Toman demasiados elementos prestados de E.T., pero no saben darle la fuerza emocional a las escenas, intentan tomas caóticas y sustos involuntarios como La Bruja de Blair (incluso dos tomas que homenajean la cinta), pero, insisto, no se siente realmente que tenga la cinta algo de corazón.
El trabajo de efectos, aunque escasos, son efectivos. Ecco es un personaje que no aparece mucho, es bien animado y tiene sus momentos divertidos, pero no es regular, lo que mata un poco su simpatía. Fuera de ahi el trabajo de los efectos es discreto, aunque dos escenas si resaltarían un poco para impresionarnos, uno que podríamos decir que sería el «momento E.T.» (sin la solemnidad de la cinta de 1981) y otro que, bien intencionado, termina palideciendo ante la misma cinta.
Llamando a Ecco es una opción para entretener a los niños, aunque la cinta ya está por salir de la taquilla. Aunque no es lo suficientemente buena como para hacer válida la vuelta al cine, sí para ponerla en una pantalla con una renta o un streaming de la cinta (seguro aparecerá pronto en Netflix). Es un homenaje moderno a las cintas de Spielberg que nos hacen recordar que esas producciones merecen ser compartidas con las nuevas generaciones y que merecerían más nuestra atención que un mal intento de homenaje.
Calificación: 6
