En el 2014, una cinta tomó por sorpresa a los fans de las películas de superhéroes que ya habían considerado que sería difícil que una cinta como Capitán América y el Soldado del Invierno fuera a ser superada por la otra cinta que Marvel Studios estaba cocinando ese año. Esa cinta, Guardianes de la Galaxia, tomó por sorpresa a los cinéfilos, pues, tomando como referencia uno de los cómics menos conocidos de Marvel, supieron aprovechar a un grupo singular de personajes, agregar un elemento cómico que se supo solidificar en sus cinco protagonistas, combinar una buena banda sonora con canciones de los setenta y dejarnos todavía con la lagrimita de fuera en el proceso… y, claro esa escena post-créditos que hizo que se vendiera una figura que no habían considerado poner en la colección por temor a los spoilers.

Tres años después tenemos nuevamente a James Gunn, quien reúne nuevamente  a los protagonistas de la primera cinta, trae a los secundarios que pudieron sobrevivir y los combinó con nuevos actores y personajes para conjuntar la secuela Guardianes de la Galaxia Volumen 2.

Los Guardianes y sus enemigos deberán reunirse para enfrentar un enemigo común.

En esta cinta regresan Chris Pratt, Zoe Saldanha y Dave Bautista como Peter Quill, Gamora y Drax, respectivamente, mientras Bradley Cooper y Vin Diesel regresan a darle voz a Rocket y  a Baby Groot. También contamos con el regreso de Karen Gillian y Michael Rooker como Nebula y Yondu, además de las actuaciones de Kurt Russell, Pom Klementieff, Elizabeth Debicki y Sylvester Stallone.

Tras completar una peligrosa tarea, los Guardianes de la Galaxia son perseguidos por sus empleadores, los Soberanos, tras una travesura que les hizo Rocket; pronto se encontrarán con un misterioso ser llamado Ego que se hace llamar el padre de Star-Lord. La curiosidad de éste por conocer a su padre y sus habilidades, obligarán al equipo a enfrentar no solo el misterio que rodea a Ego y su misterioso planeta, sino también el tener que enfrentar a un grupo de Ravagers que los persiguen deseosos de cobrar la recompensa que los Soberanos han puesto sobre la cabeza de los Guardianes y de Nebula, quien contra su voluntad termina envuelta en esta aventura.

Siempre se ha dicho que»segundas partes no son buenas» y es raro el caso en que una secuela supere a la primera, y en el Universo Marvel debemos aceptar que la única cinta que ha superado a la original es El Soldado del Invierno. La mala noticia es que Guardianes de la Galaxia Volumen 2, queda un poco corta en relación a la primera película.

Kurt Russell interpreta a Ego, el Planeta Viviente y padre de Peter Quill

Pero eso no significa que la película sea mala, simplemente, que la fórmula que hizo que la primera cinta fuera un éxito ha sido completamente exprimida por la competencia en los años subsecuentes. ¿Un tráiler con una rola pegajosa que se acomodara al ritmo de las escenas?, ahora todas las cintas comerciales lo hacen (y cada vez que lo hacen los cinéfilos sentimos que nos dan justo en el uga-chak… perdón en el corazón), ¿Una banda sonora pegajosa? ya muchas cintas lo hacen, bien o mal… y podemos seguirle.

Es entonces que la segunda cinta prácticamente nos muestra muchos paralelos con la fórmula original de inicio a fin, pero al quitar ese detalle del factor origen, y ahora buscan fortalecer el término de familia que los Guardianes se ganaron a pulso, es cuando notamos que no todo lubrica correctamente y el ritmo se cae por momentos.

Algunas cosas funcionan perfectamente e impactan al público, como el hecho de dejar a Groot en su tamaño pequeño desde un inicio, siendo más que un mini-Groot (como suele ocurrir en los cómics y hasta en la serie animada Ultimate Spider-Man), un bebé Groot que es tan inocente como letal, tan divertido como ocurrente y que si nos deja enternecidos, riéndonos y hasta repite uno que otro gag que le vimos en la cinta anterior, para risa de los presentes.

Groot Bebé sin duda será el botón para impulsar la venta de juguetes de la cinta.

Otras cuestan trabajo que funcionen bien. Rocket Raccoon no funciona tan bien como en la cinta anterior, como buscando desesperadamente portarse como el sangrón del equipo; la relación entre Peter y Gamora se siente un poco forzada, pero quien sabe sacar provecho de su personaje es Dave Bautista como Drax quien, después de Groot, tiene las mejores ocurrencias en la trama, especialmente cuando tiene que interactuar con el nuevo personaje de Mantis, una adorable extraterrestre con la capacidad de leer las emociones, interpretada por Pom Klementieff.

El tema de la familia es ahora más fundamental en la trama, dejando la eterna pregunta de qué familia será más importante, la formada de manera biológica (Quill y sus padres), los vínculos familiares casi rotos por las circunstancias (la relación entre Gamora y Nebula) o aquella que surge por extrañas circunstancias, como los propios Guardianes. Y este punto de la historia es el auténtico hilo conductor de la trama en una historia que por su ritmo hace que caiga en el riesgo de la confusión.

También vemos como Gunn, busca expandir más el universo alrededor de los Guardianes y es entonces cuando vemos nuevos personajes como Mantis, los Soberanos, y finalmente, Ego, el Planeta Viviente, interpretado por Kurt Russell, un personaje tan sorpresivo como divertido, es interesante ver la manera en que Ego consigue ser retratado y la manera en que, pese a que tiene una figura humana, es el centro de los mejores momentos de la producción en cuanto a escenografía y efectos visuales se refiere. Sin duda, uno de los villanos mejor elaborados que ha tenido Marvel en mucho tiempo.

La película no defrauda en la cuestión visual y la banda sonora.

Aunque los villanos secundarios tienen fuerza en la trama, podemos decir que los nuevos personajes, los Soberanos, son un tanto mediocres en su ejecución y Elizabeth Debicki se queda corta en su interpretación de Ayesha, eso sí, es bastante impresionante la forma en que su ejército ataca, lo que haría feliz a cualquier gamer de la vieja escuela (en serio), pero los Ravagers son los que realmentenos dan los mejores momentos de la trama sin contar a Ego, las escenas de batalla son tan divertidas como letales y, sin duda, nos hacen notar que son los auténticos piratas del Universo Marvel.

No se si para bien o para mal, las actuaciones de los actores titulares, básicamente son lo que vimos en la primera cinta (con la excepción de Groot, claro está), de hecho noto que Dave Bautista luce mucho en esta película y hasta se roba las escenas con Saldanha o Klementieff y por poco deja fuera del juego a Pratt, quien luce un poco menos fuerte que en la cinta anterior. Vin Diesel, quien prestó su voz a Groot para 16 idiomas distintos, sin duda se esforzó mucho para que Bebé Groot no solo fuera el auténtico gancho para comprar juguetes este año sino para ser el centro de los mejores chistes de la película.

La parte visual sigue siendo uno de los grandes fuertes de la película, aunque se quedaron cortos en cuanto a la cinta anterior, la banda sonora sin duda es la que gobierna la película, donde podemos ver el mejor uso que le hayan dado a Mr. Blue Sky de Electric Light Orchestra y ver como The Chain de Fleetwood Mac tiene un doble efecto en la película. Vamos, hasta ahora la banda sonora nos dejará conmovidos.

Los Soberanos, villanos dorados, con muescas de perfección y el nivel de actuación de Dakota Johnson (además del mejor videojuego de la galaxia)

La película tiene muchos detalles que, al ser captados, nos hacen notar que Avengers: Guerra Infinita podrá sacar provecho de ellos, nuevos personajes, nuevos actores famosos en la trama (algunos se mencionan como Stallone, otros nos sorprende ver a otros actores al final de la cinta, algunos de muy buen nivel), cameos de personajes que dan su «pisa y corre» y claro, Stan Lee, que ya no es un spoiler decir que aparece en la cinta, ahora el spoiler es revelar cómo aparece, sin duda resolviendo una de las dudas mejor guardadas del Universo Cinemático Marvel.

Aunque la cinta parece tener un tono familiar, especialmente por Groot Bebé, no es para niños, hay algunos diálogos que si te harán cuestionar si realmente un niño podría ver la cinta, pero ya en familia es más fácil resolver estos líos, pero insisto, entre tanta violencia e insinuaciones sexuales que tiene la cinta es mejor considerar dejar a los chiquitines en casa en esta ocasión.

En conclusión, Guardianes de la Galaxia Volumen 2, queda un poco corta en su intento de igualar o superar a la primera, si se siente la necesidad de intentar algo más oscuro para la tercera entrega, pero encarrila bien la historia hacia Guerra Infinita. Es una buena pieza de entretenimiento que marca la primera de tres cintas que el Universo Cinemático Marvel tendrá este año y, por supuesto, quédense a ver los créditos que tiene cinco escenas intercaladas y una forma divertida de exhibir los créditos mientras esperan cada una de las escenas.

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