Daedalic Entertaniment, en conjunto con Shining Gate Software, traen Decay: The Mare, juego de culto que originalmente salió en Xbox Live Arcade para después trasladarse a los dispositivos móviles con Android y que ahora llega a la PC para llenar de horror y misterio las vidas de los jugadores, pero ¿será otro acierto a la lista de Daedalic, o morirá en el intento de causar terror y envolver a los usuarios en su historia? Descúbrelo a continuación.

Decay nos narra la historia de Sam, un adicto que se interna en la institución Reaching Dreams para limpiarse de todos sus demonios y adicciones, pero ya dentro de esta institución descubre que la cura es peor que la enfermedad, pues se la vive dopado y teniendo vivencias extrañas, desmayos repentinos, los problemas de la abstinencia y, como si todo eso no fuera suficiente, hay varios entes sobrenaturales que le persiguen.

Dicha historia se cuenta en tres episodios repletos de acertijos en los que debemos recorrer distintos sectores de Reaching Dreams mientras sea de noche, pues al llegar el día el lugar cambia de manera drástica. Este elemento ayuda mucho al juego en conjunto, pues crea una ambientación donde las teorías sobre la historia abundan y el temor de que algo te ataque en la próxima habitación está siempre latente.

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Abstinencia, suicidio y ataques sobrenaturales son temas recurrentes en la historia de Sam

Las mecánicas de Decay son las clásicas de los juegos point-and-click en las que debes mover el puntero del mouse por los escenarios, buscando objetos con los que interactuar y/o recolectar para después resolver los acertijos que se presenten; la diferencia de este título junto a otros del género es que aquí todo ocurre en vista de primer persona, por lo que los distintos escenarios se muestran de manera limitada y no en su totalidad como suele ocurrir en las aventuras gráficas.

Lo interesante de este estilo de vista es cómo se utiliza en el juego, ya que al trasladarte a ese nivel de profundidad en los niveles se logra un buen nivel de tensión y terror. Además de está implementación, también se tienen los objetos extras que se deben recoger, como es el caso de un cierto número de monedas en casa y episodios o recortes de diarios que ayudan a comprender más la historia; dichos recortes los podemos encontrar en ciertas partes del escenario o hasta en los mismos objetos principales que recogimos con anterioridad, pues se da la opción de poder examinar cada objeto en el inventario.

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Los acertijos suelen ser sencillos de resolver si prestas atención, pero de vez en cuando se presentan algunos bastante retadores

En el ámbito de arte y soundtrack, ambos son muy oscuros y densos, los escenarios de Reaching Dreams durante la noche son mazmorras deterioradas, cuartos llenos de misterio en donde se huele a muerte y siempre acompañado de un ruidos extraños para alertar de que nunca estamos solos, gruñidos ocasionales y una tétrica pieza de piano ocasionalmente acompañada con otros instrumentos para dar un ambiente lúgubre. Aunque el arte no es lo mejor que se ha visto, es bueno y se adapta a cada ambiente y no le pide nada a los clásicos juegos de horror y terror.

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Decay: The Mare es más un juego con una genial ambientación y buen nivel de reto pero con una historia demasiada extraña y con muchos giros de tuerca a tal punto de que el final deja un mal sabor de boca. Para su buena fortuna, el estilo de juego mezclado con la perspectiva en primer persona más los puzzles bien logrados dan como resultado un juego de terror que disfrutas si eres fan del género y, disfrutas mucho más si en tus gustos también se encuentran las aventuras gráficas. Por otra parte, si lo tuyo es más el terror mezclado con acción, no te recomiendo probar este juego, pues te aburrirás con su narrativa lenta y densa.

Calificación: Ocho punto cinco

La reseña se basó en una copia de PC otorgada por las personas de Daedalic Entertainment a quienes agradezco las facilidades para la realización de esta reseña.

Eso es todo en esta ocasión, soy @Omarsdt, agradezco tu tiempo al leer esta reseña y espero tu opinión.