“¿Para qué? La vida no te da barreras” Después de la inmensa cantidad de frases que nos brinda esta cinta con las cuales se podría iniciar, esta sería la más adecuada, ya que sí es como en la realidad, Boyhood: Momentos de Una Vida nos demuestra que a pesar de las grandes dificultades que podría afrontar, logra codearse con los grandes largometrajes de toda la historia del cine. En esta ocasión, el director estadounidense Richard Linklater con un argumento tan sencillo, pero reflejando la etapa más complicada de un individuo, nos entrega la que posiblemente es la mejor película del año.

Boyhood nos permite visualizar a Linklater como uno de los grandes cineastas de la historia. Es cuestión de tiempo para que no quede una sola duda. El escritor y director nacido en  Houston, Texas es un verdadero poeta de lo cotidiano, y nos lo demuestra en su última obra, la cual cambia el juego de una manera muy impactante, se gana su lugar en la cápsula del tiempo cultural.1

La premisa es engañosamente simple: Seguir a un chico de Texas con padres divorciados, a medida que crece entre los seis a los 18 años, desde las cosas más sencillas de niños, hasta al borde de la universidad y la vida adulta. Podría parecer un documental más en donde seguir a una misma persona durante años ya no es algo innovador, pero aquí Linklater está elaborando una película, una ficción con actores y un guión. Mason, interpretado por el notable Ellar Coltrane, interactúa principalmente con su papá (Ethan Hawke), su madre (Patricia Arquette) y su hermana Samantha (increíblemente interpretada por Lorelei Linklater, la hija del director). Hawke y Arquette nunca han estado mejores y Coltrane da una actuación de la cual  se hablará siempre que el público hable de cine.

Una cinta filmada en 39 días y que abarca 12 años, Boyhood fluye sin problemas con sus más de dos horas y 40 minutos, mientras vemos a personajes en distintas edades, conciliar, amar y madurar (o no). Hawke sobresale como un padre ausente, pero sumamente carismático, mientras que Arquette conmueve como una madre que busca llevar a sus hijos siempre hacia delante, aunque padeciendo de sus malas decisiones siempre que se trate de buscar al hombre indicado. Pero la película pertenece a Coltrane, especialmente cuando nos muestra cómo Mason es capaz de hacerle frente a los peligros de seguir una carrera poco convencional y buscar salir con la chica más linda de su escuela (Zoe Graham).

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Boyhood pone Linklater en la cuerda floja sin red de seguridad, pero logra librar el reto y de una manera sorprendente. El detallado de cada año durante una docena de años (39 días y 143 escenas en total) parece tallado a mano. Los actores, entre ellos dos niños, crearon el tapiz vital de una vida como ninguna otra cosa que se haya visto en el cine. Momentos de Una Vida nos hace sentir euforia por las películas, con su misterio, su poder, su capacidad de movernos entre la risa y las lágrimas. De una manera muy sencilla y cautivadora, es una obra maestra sin pretensiones.

Título original: BOYHOOD

Director:  Richard Linklater

Duración: 2 hr. 45 min.

Fecha de estreno: 1 de enero de 2015