Mientras platicábamos de la cinta más reciente del Universo Cinemático Marvel y todo lo que está alrededor de ella en la edición número 300 de nuestro podcast ResetCine, @ChrisOGeek me preguntó «¿qué estabas haciendo cuando comenzó todo esto… hace diez años?». 

Creo que lo que dejó esa escena post-créditos cuando fui a ver Iron Man en el 2008 sigue fresca, aún rebota en mi cabeza la frase que Nick Fury (Samuel L. Jackson), «vengo a hablar contigo sobre la Iniciativa Avenger«. Jamás imaginé que el camino comenzaría a ser trazado y que, diez años después, vería Avengers: Infinity War, que, para muchos fans del género, es un sueño hecho realidad. 

Los hermanos Anthony y Joe Russo, quienes dirigieron las últimas dos cintas del Capitán América, El Soldado del Invierno y Civil War, están al gente de una superproducción que incluye a prácticamente todos los superhéroes vigentes del Universo Cinemático Marvel y a sus intérpretes, desde auténticos veteranos como Robert Downey Jr., Chris Evans, Chris Hemsworth y Scarlett Johansson, hasta las más recientes contrataciones representadas en Tom Holland, Benedict Cumberbatch y Chadwick Boseman, en total 33 actores estelares y un villano principal, Thanos, interpretado por Josh Brolin. 

 

De un lado Tony intenta resolver el problema «en casa»

Y para quienes vieron Thor: Ragnarok, la historia comienza justo unos momentos después de la escena post-créditos, Thanos ha comenzado la búsqueda de las Gemas Infinitas y, con la Gema del Poder en posesión comenzará a poco un camino sangriento y azaroso para obtener, junto con sus hijos, cada una de esas gemas, mientras los Avengers, divididos por los eventos de Civil War, y los Guardianes de la Galaxia, deberán unir fuerzas con Doctor Strange y Black Panther para poder enfrentar la poderosa invasión a la Tierra que implica la búsqueda de dichas gemas. 

Los Hermanos Russo tienen uno de los retos más grandes de la historia del cine, si bien las cintas de desastres de la década de los setenta siempre destacaban por conjuntar una docena de superestrellas que, de alguna manera u otra, enfrentaban a la catástrofe en pantalla (un avionazo, un terremoto o un incendio épico),  ¿poder hacer una historia congruente con muchas sub-tramas, seis gemas infinitas, 33 superhéroes y un cataclismo que ni el profeta más pesimista se hubiera imaginado salvo en los cómics? Si, la preocupación es grande, pero esta empieza un poco a disiparse al comenzar a ver cada personaje en pantalla y la resolución en sus actos, buenos o malos. 

Algunos tendrán muy poco tiempo en pantalla, el cual algunos aprovechan para lucirse, ya sea en sus poderes o en su capacidad actoral, otros simplemente pasan sin pena ni gloria y tenemos por ahí dos o tres que seguro nos causarán alguna decepción, pero lo cierto, es el detalle de que si bien, los tres Avengers principales (Capitán América, Iron Man y Thor), tiene cada uno una sub-trama destacable, realmente los tres palidecen ante la historia y presencia del supervillano Thanos. 

 

Mientras tanto Steve intenta contener la invasión más fuerte que ha tenido la Tierra.

Tomando algunos elementos del comic Thanos Quest y adaptando algunos detalles para hacerlo fácil de insertar al Universo Cinemático (como quitar su relación con Lady Death), el personaje es un tanto nihilista, pero que guarda algunos ases bajo la manga y aunque para mí el supervillano del año ya se definió para mí en febrero, Thanos le da batalla y vemos a un personaje que se mastica bastante bien, no obstante, cuando no está Thanos pateando traseros o combatiendo con otros superhéroes, su historia es un tanto lenta y, la falta de ese detalle de Lady Death para justificar sus acciones, hacen que su personaje sea un tanto hueco al final y que el cumplimiento de su propósito deje más preguntas que respuestas. 

Pero no debemos preocuparnos por las preguntas, o por lo menos eso debemos pensar, pues finalmente es la primera parte de un evento cinematográfico que culminará exactamente en un año, los fans del Universo Marvel aceptarán lo que vieron y esperarán ansiosos ese gran final que los Russo ya están cocinando, mientras los no fanáticos no sentirán que sea la cinta de su agrado. 

Salvo por Brolin, quien logra cubrir las expectativas de su personaje, es complicado definir el trabajo de las 33 estrellas en conjunto, cuando vemos el peso de cada uno de los personajes en la trama, podemos decir que los tres principales cumplen con su trabajo, Benedict Cumberbatch sigue impresionando como Doctor Strange, Mark Ruffalo, a falta de efectos visuales, se convierte en el referente cómico de la cinta e incluso Elizabeth Olsen y Zoe Saldanha saben meter el drama en sus propias historias. Quizá los que si nos quedan un poco a deber con actores como Paul Bettany, Chris Pratt o Tom Holland, que parecen colgarse de algunos clichés que la cinta mete a fuerzas y terminan decepcionando. 

 

Mientras Thor, se lanza a… Yo Soy Groot, con Rocket y Groot.

De ahí el otro gran factor son los efectos visuales, sin duda hay momentos en que la pantalla verde es inevitable, con los paisajes que los planetas extraterrestres deben de dar y la presencia de personajes que solo con la computadora podemos concebir como Rocket o Groot, pero no debemos subestimar esa sobrecarga con los efectos, los Russo saben sobrevivir con eso y logran darnos excelentes secuencias de acción, aunque es complicado encontrar una escena que podamos decir, sea tan memorable como para colocarla a contender con las mejores peleas que el Universo Cinemático nos ha dado, pues algunas se sienten como retomadas de otras cintas y una en particular se sintió tan dispareja, que hasta parece fácil descartarla en contraste con la épica batalla que se ve momentos antes. 

La banda sonora queda perfecta, con los tonos oscuros que Alan Silvestri sabe colocar en cada minuto de la película, insertando los tonos de películas anteriores cuando un superhéroe en particular aparece o incluso poniendo una canción retro cuando vemos a los Guardianes en movimiento, nada se le va a Silvestri en la curaduría de la banda sonora que sin duda ayuda a mantener el suspenso en la audiencia. 

Avengers: Infinity War supera a varias de las cintas del Universo Cinemático en un chasquido de dedos, pero algo se le quedó olvidado en el camino, quizá la sensación de que sea una primera parte y su final nos deje con un extraño sabor de boca (uno que sabe igual a malo y a bueno), pero no podemos dejar de pensar que el año que viene tendremos las respuestas que esta cinta nos dejó y salgamos avante en ver el final de la tercera fase. Además, ¿sabían que la cuarta fase durará 9 años? Si, esto aún no parece acabarse. Yo aún no puedo concebir qué estaré haciendo en el 2028, seguramente llevando a mi familia a ver el final épico de dicha fase, seguramente con más canas que Tony Stark. 

 

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