Tras varios años haciendo películas con importantes directores y tramas serias o bastante complicadas para los propios actores, como le ocurrió a Denzel Washington con «The Flight», éste actor y Mark Wahlberg se lanzan a un proyecto veraniego de acción y comedia llamado «2 Guns» que, contrario a lo que pasó con «Armadas y Peligrosas», esa chickflick con pistolas de Sandra Bullock y Melissa McCarthy, la traducción del título de la cinta da en el clavo.
(Había rumores de que El Conjuro se iba a llamar «Demonios Armados y Peligrosos«, Juego de Niños, «Chamacos Armados y Peligrosos» y No Se Aceptan Devoluciones «Comediante Armado y Peligroso» (¿de qué?, no sé, pero es peligroso)…, bueno, quedaron advertidos, volvamos a la reseña…)
Dirigida por el director islandés Baltazar Kormákur y basado en un comic, Armados y Peligrosos nos cuenta cómo un policía encubierto de la DEA, Bobby Trench (Washington) trabaja junto con un misterioso delincuente llamado Stig (Mark Wahlberg) para un narcotraficante mexicano. Cuando una operación encubierta fracasa, Bobby decide seguir el consejo de Stig y roban dinero de un banco en la frontera sin saber que en ese banco hay más dinero del que creen que hay y, peor aún, hay muchos secretos que se revelarán de una manera violenta, hilarante e inesperada y que arrastrará por igual a nuestros dos delincuentes, a la DEA, a los Navy Seals, a los narcos y hasta a la CIA.
La cinta tiene de todo para los fans de las películas de acción de vieja escuela. El par disparejo que forman los protagonistas recuerda mucho a cintas como las de Arma Mortal aunque, comparada con otras, la trama intenta dar una buena razón a toda la violencia que se desata en la pantalla, violencia que, en ratos, cae en momentos algo sádicos y a clichés comunes de las cintas de violencia fronteriza (dije que había narcos, ¿no?, entonces conste que les advertí), lo cual puede ser desagradable a la vista de muchos.
Es cierto, en ratos la cinta puede sentirse un tanto lenta para ser de acción, pero esto se alivia con los momentos hilarantes, las maldiciones en español (que seguro se le pegaron a Washington con Hombre en Llamas) y los inesperados giros de tuerca que trae la trama, que es algo que si te hace mantenerte sentado al asiento sin ser tan predecibles. Mención aparte son los taquitos de ojo que nos pone la actriz Paula Patton (Misión Imposible: Protocolo Fantasma) quién de pronto nos da su «momento Martha Higareda«, si saben a lo que me refiero.
Mención aparte tienen los antagonistas, que, al ser de diferentes bandos, unos si dan el ancho y otros quedan demasiado predecibles. En todo caso, Edward James Olmos cumple con su papel del narcotraficante, aunque no digo lo mismo de Bill Paxton y su interpretación de un policía corrupto que casi cae en la caricatura.
Como cinta B-15, esperen mucha violencia, algo de sensualidad y muchas palabrotas. No es la película que reformará el género ni la que vaya por un premio, pero si se merece la vuelta al cine si lo que quieren es una cinta que les permita descargar la adrenalina acumulada en la semana, mas, si eres sensible y te ofenden los clichés comunes de las películas de acción en la frontera, entonces te advertimos, encontrarás varios de ellos. Tampoco esperes violencia al nivel de una cinta de Tarantino, pero si una buena dosis de acción.
Calificación: 7.5
