El género de los juegos musicales ha sufrido de varios altibajos, y aunque muchos solo conocerán o ubicarán Guitar Hero o Rock Band, lo cierto es que es un género con mucha historia detrás. En Japón, dichos juegos son uno más dentro de la industria y que se disfrutan mucho, pero Occidente ha sido muy «especial» en relación a lo que las diferentes compañías han ofrecido hasta el momento y hay que reconocerle a las franquicias que han podido sobresalir a pesar de las diferencias culturales.
Ahora bien, si nos adentramos a la cultura popular de Japón y observamos a los exponentes que han logrado cruzar fronteras podemos encontrar a Hatsune Miku, la estrella pop digital más famosa del momento. Con una base de más de 10 juegos ya en su haber (entre juegos de consolas, arcades y móviles) y con 3 juegos localizados para el continente americano, Miku hace su debut en la actual generación con Project Diva X para el PS4 de una manera un tanto mixta.
Primero lo básico: Project Diva X es un juego de ritmo donde tendremos que presionar los botones y pad análogo de manera que sigamos la canción de la diva digital. Conforme vayamos haciendo secuencias de botones iremos incrementando el combo que nos dará más puntos. Un añadido de esta entrega son las secuencias de Rush, donde tendremos que presionar una nota (botón) repetidas veces hasta que nos indique el marcador, simulando cuando nuestro personaje sostenga una nota vocal, lo que da un poco más de inmersión al título si le agregamos las secuencias de vídeo que ocurren de fondo que reaccionan ante nuestras acciones.
Todo es cuestión de ritmo. Tanto en Project Diva X, como en los juegos de ritmo en general. Son pocas las innovaciones que los desarrolladores pudieran implementar en cuestión de mecánicas, siempre lo más vistoso y el mayor agregado a cada nuevo título serán las mejoras visuales y el tracklist del mismo.
En el apartado gráfico, Project Diva X cumple al ser un juego de nueva generación. 60 cuadros por segundo constantes es algo que se agradece y que le hace mucho bien al juego dado que la precisión siempre se espera sea la óptima. Lo efectos visuales están bien hechos, así como los modelos de los personajes. Cada concierto de Miku brillará en tu televisión en HD.
Por otra parte, el tracklist del juego deja mucho que desear. Con un total de 24 canciones en total, deja al jugador con un catalogo muy, pero muy por debajo de lo esperado. Simplemente hagamos la comparación con los títulos pasados. En su momento Project Diva F trajo consigo un tracklist de 38 canciones, mientras que Project Diva F 2nd traía 40 canciones más su DLC de 16 canciones dándonos un total de 56 canciones en un solo juego. Si nos vamos al 3DS, Project Mirai DX traía un total de 48 canciones (al contener las canciones del primer título que no llegó a nuestro continente), y bien, al final nos encontramos con Project Diva X con sólo 24 canciones.
En parte los desarrolladores sabían de esta falta de contenido y lo trataron de solucionar con modos de juegos que si bien son nuevos y refrescan un poco a la franquicia, no sabemos hasta que punto fue para rellenar esa falta de canciones, o si estos mismos fueron la causa de disminución de canciones en el tracklist de lanzamiento.
Tenemos el modo de campaña donde tendremos que ayudar a Miku y sus demás amigos a regresar el color de 5 diferentes mundos con diferentes auras: Classic, Cool, Cute, Quirky, y Elegant. Cada una de estas «nubes» como bien lo dice su aura, tiene un estilo diferente, por lo que dependiendo de estas serán las canciones que encontremos o que tengamos que pasar. El problema con este modo de campaña o de historia es que se siente totalmente innecesario, aunque los diálogos son graciosos (hasta cierto punto) y algunas cutescenes valen la pena, no justifica que el jugador tenga que estar amarrado a este modo para desbloquear todos los contenidos porque, dicho sea de paso, tienes que pasar las canciones en niveles easy o normal para avanzar y seguir desbloqueando más elementos. Para los jugadores que van iniciando es una excelente introducción, sin embargo, para los veteranos o seguidores de esta franquicia será un dolor de cabeza tener que jugar dicho modo para lograr el mejor récord o modo perfecto de cada canción.
Uno de los pocos puntos rescatables del modo de campaña es que obliga al jugador a utilizar los módulos y accesorios adecuados para poder conseguir el mejor puntaje, que para el modo historia cambia a ser una barra de voltaje con la que iremos recuperando la energía de cada nube.
Por último, tenemos el Concert Mode, el cual es un editor bastante robusto para crear tus propias secuencias de video. Y cuando décimo robusto, vaya que lo es, con parámetros para variar la posición de la cámara, la iluminación, el escenario, los movimientos de nuestro personaje y tener las mejores tomas te sentirás como un verdadero director de vídeo musical. Sin embargo, no le veo mucho uso para los jugadores que solo desean seguir el ritmo de su canción favorita.
En lo que concierne al DLC de lanzamiento, tenemos dos canciones, «Sharing the World» y «Hand in Hand» que valen mucho la pena (más viendo el catalogo que trae el juego). También encontraremos accesorios y módulos de «Snow Miku» que están dirigidos para los fans mas hardcore de Miku. Estos contenidos adicionales son adecuados para el precio y son recomendables ampliamente. Esperemos que por lo menos vía DLC se arregle este problema de contenido que el juego presenta.
Para los jugadores novatos o que esta sea la primer entrega que se animen a comprar quedarán satisfechos, con un modo de campaña que cumple muy bien como tutorial e introducción. Pero los jugadores que han seguido cada entrega de la diva digital más famosa del mundo quedaran con una experiencia agridulce ante lo que esta les pudo ofrecer.
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