Blizzard comenzó con el pie derecho en la Gamescom con el anuncio de una nueva expansión: World of Warcraft: Legion. Lo cual quiere decir que nuestra aventura sigue y la historia de Warlords of Draenor e Illidan está de regreso.
Tendrá además, una nueva clase (Demon Hunters exclusiva de los Night Elves y Blood Elves), un nuevo límite de nivel de 110, nuevos calabozos, nuevo sistema de honor, un nuevo continente y un sistema de personalización de armas.
Blizzard ha hecho notar que veremos a través de los “ojos Illidianos” la historia de los Demon Hunters y su pasado. La narrativa estará envuelta en el Black Temple y habrá referencias directas y comparaciones con la Burning Crusade. Los Titans y Val’kyr también estarán involucrados en la historia, así como también Dalaran.
Diferentes especificaciones y clases estarán presentes en las misiones para conseguir armas específicas, todas ellas tendrán un papel importante en las historias desarrolladas en las zonas de la Icerown Citadel. Es importante notar que tanto la clasificación Demon Hunter y Death Knight entran en la Clase de Hero.
