Hace 10 años muchos salimos del cine con cierta desilusión, no solo por la forma en que la trilogía de las precuelas había develado el pasado detrás de Darth Vader, el personaje base de las seis películas de Star Wars, sino también por la certeza de que tardaríamos mucho en ver otra cinta.
No nos imaginábamos que, 7 años después, Lucasfilm sería comprada por Walt Disney Company y que firmarían como director a J.J. Abrams, quien había revivido exitosamente a Star Trek en los cines de todo el mundo. Entonces sabíamos que era un hecho que habría otra cinta de Star Wars.
La emoción poco a poco fue creciendo cuando Abrams fue soltando ligeramente los detalles de la cinta, que algunos viejos personajes como Han Solo, Chewbacca, Leia Organa, C3PO, R2D2 y Luke Skywalker estarían en la película y la inclusión de nuevos personajes, poco a poco, notamos que la campaña con la que se promovió la cinta nos fue dando esas dosis de expectativas que tanto necesitaba el público, pero cuidando detalles que no nos hicieran sufrir una sobredosis.
Este 17 de diciembre, El Despertar de la Fuerza ya esta en los cines, al fin los fans de Star Wars nos podemos sentar en la sala de cine y decir «Estamos en casa», pero, ¿la película llenó las expectativas?
La cinta tiene las actuaciones de Daisy Ridley, John Boyega, Adam Driver, Oscar Isaac, Lupita Nyong´o, Harrison Ford, Peter Mayhew, Carrie Fisher, Anthony Daniels, Kenny Baker, Mark Hamill, Domnhall Gleeson, Max Von Sidow y Andy Serkis entre otros actores.
Para no dar spoilers innecesarios resumiré la sinopsis en la aparición de un nuevo grupo militar llamado El Nuevo Orden que busca dominar la galaxia muy, muy lejana que conocemos, esto 30 años después de El Regreso del Jedi. Es entonces cuando tres personajes cruzan caminos, un droide llamado BB-8, una recolectora de chatarra llamada Rey y un fugitivo conocido como Finn. Ese cruce de caminos será el comienzo de una gran aventura en un universo que estará lleno de peligros, intrigas y, claro, un duelo entre los lados de la Fuerza.
Hay cosas que debemos poner en claro, la primera es que debemos pensar que esta cinta es dirigida por J.J. Abrams, si ustedes quedaron satisfechos con el trabajo que hizo en series como Lost y las pelìculas de Star Trek, entonces prepárense, porque Abrams, que es un genio para dar excelentes giros de tuerca y dar finales que dejarán discusiones, esta ahí mas que listo para hacer ambas cosas.
Y El Despertar de la Fuerza es, sin duda, una carta de amor a la mitología de la trilogía original. Vemos en cada detalle alguna referencia, alguna imagen, sobre todo cuando están en el planeta Sarlaac, que quienes han jugado Battlefront y descargaron ese contenido, saben de lo que estoy hablando. A pesar de ser un territorio nuevo, está lleno de una fúnebre nostalgia. Y ahí empieza el gran trabajo de los efectos especiales, donde la producción sabe fusionar muy bien los efectos prácticos (aunque en momentos realmente se ven ya muy viejos), con los efectos por computadora, mismos que se usaron de varias maneras, sobretodo en el desarrollo de personajes que hubieran sido imposible plantearlos en forma física como los personajes de Lupita Nyong’o y Andy Serkis.
Mas los personajes que ya conocimos en un formato más tradicional, como Chewbacca, C3PO o R2D2, mantienen ese detalle de vieja escuela, con actores dentro del traje, que mantienen la firmeza de esos personajes, estén mucho o poco tiempo frente a la cámara. De esos personajes imposibles de reproducir humanamente, resalta BB-8, ese androide redondo que toma mucho protagonismo y nos termina encantando y del que podemos decir que es el segundo mejor personaje nuevo de la película y, lo mejor de todo, muy poco de este droide se nota que fue animado por computadora.
Del lado actoral, hay dos constantes, Abrams intenta vendernos nuevos personajes, nuevas historias, pero también nos da nuestra dosis de vieja escuela al observar que Ford, Fisher, Daniels o Mayhew, se ven cómodos en sus personajes, avejentados o no. Y por supuesto, Harrison Ford se roba la cinta, por mucho. Puede presumirse que opaca a todos aquellos con los que se cruza durante la historia. Si, Han Solo esta realmente en casa.
De los nuevos personajes, es interesante el trato que le dan a dos de ellos, Rey y Kylo Ren, que son, de hecho, protagonista y antagonista de este episodio. Rey no es cualquier chica indefensa, sabe patear traseros, tiene sentimientos y Ridley logra acomodar mucha química con Boyega y con Harrison Ford. Ridley sabe realmente imprimir esos elementos de heroísmo que a Natalie Portman le faltó imprimir en El Ataque de los Clones y podemos decir que también tiene mejores diálogos para las interacciones con otros personajes.
Kylo Ren, es un caso particular, si bien Adam Driver sabe llevar bien su personaje que se va a quedar en boca de todos, les guste o no. Si les gustó el personaje, lo van a odiar, si no les gustó el personaje, no lo odien, van a odiar a quien inventó a ese personaje. Pero Driver realmente sabe manejar bien a su personaje, imprime bien esa oscuridad que debe tener como un villano del Lado Oscuro, pero también refleja la edad real del personaje. Solo me queda pensar que Abrams se precipitó en algunos detalles, al grado de que, en el punto de la comparación, no es EL VILLANO (léanse otras reseñas de Star Wars para que sepan a que me refiero). Tan solo los cimientos de dicho villano.
John Boyega logra librar a su personaje que, junto con el de Rey toma un camino muy interesante y, cuando se encuentran ambos personajes, las mejoras en su personaje van creciendo. Pudo haber causado que la cinta fracasara, es un personaje que desequilibra toda la película. Boyega logra mantenerlo bastante firme para que su parte llegue a buen puerto. Sí, no tuvimos un Jar Jar Binks aquí, es un hecho.
Ahora va lo importante, la trama, la dirección. Todo esto de lo que hemos escrito (y falta mencionar la excelente banda sonora, siempre fuerte en la Fuerza, que John Williams compuso), tendrá sentido cuando por fin digamos si nos gustó el trabajo de J.J. Abrams.
Decía atrás, Abrams logra una carta de amor a la trilogía original, aunque también la estructura de esa carta parece escrita en el mismo tono con que Lucas escribió su amor a su franquicia con Una Nueva Esperanza. De hecho, comparte muchos elementos con esta primera cinta, al grado que los fans sentirán que están en un territorio demasiado familiar.
Pero Abrams no se queda ahí, como pasó con Star Trek. Abrams decide romper cosas que los fans de Star Wars consideran sagradas, intocables, esos detalles que van a causar polémica, discusiones, y seguro hasta más de uno odiará a Abrams por la resolución de la trama. Si los trekkies casi colgaron a Abrams por dos o tres detalles de cómo manejó a cierto villano importante, no me quiero imaginar lo que harán los warsies al salir del cine.
Yo veo también un duro desperdicio de recursos importantes en nombre del drama, como ver el poco tiempo que aprovecharemos la presencia de actores como Max Von Sidow o Gwendoline Christie. De ver que algunos momentos que queríamos ver, solo son cameos o referencias. Este tipo de detalles dejarán un sabor agridulce, podemos decir que algunos detalles solo salen para posar en la foto y ya.
Mas algo que debemos aceptar y tomaremos con los brazos abiertos es el enorme mundo de posibilidades que Abrams ha abierto. Imaginen todos los cómics, películas, series y parafernalia que va a salir para conectar los cabos sueltos entre El Regreso del Jedi y El Despertar de la Fuerza, y más importante, atar los cabos que deja la misma cinta y que seguramente los siguientes dos episodios no podrán resolver del todo.
De ahí surge otro detalle: los que no están tan clavados con Star Wars, se quedarán con muchas preguntas en la cabeza, los fans nuevos podrían huir al pensar en todo lo que tienen que ver de los episodios anteriores para entender el porqué de algunos personajes y naves.
Finalmente, no me queda más que afirmar que Abrams logró sacar la cinta, y una que realmente ve con respeto a la trilogía original, que incluso puede presumir de ser un tanto superior a El Regreso del Jedi, pero que no logrará superar lo hecho por Irvin Kershner en El Imperio Contraataca o por el propio George Lucas en Una Nueva Esperanza. Se ha acomodado para mí como la tercera mejor cinta de la saga, con el estilo con que Abrams hace sus cintas, ha abierto el Universo Star Wars a un nuevo mundo de posibilidades, tanto para completar la nueva trilogía que continuará Rian Johnson, como para ver hacia atrás.
Si son warsies (fans de Star Wars), la tienen que ver, si aprecian el trabajo de Abrams, la tienen que ver, si no son fans (de ese 1%) véanla, es una excelente opción, una muy divertida para ir al cine. Esta es la película de la temporada y dudo mucho que haya algo mas entretenido que ver este final del año. Pero, si buscan una cinta de Óscares en actuación, historia o dirección, esperen al siguiente mes, se los aseguro.
Calificación: 8.5
