Diversión estilo nórdico
Jotun: Valhalla Edition es uno de los títulos que se llevó varios premios de diseño indie durante el 2015, y es que Thunder Lotus Games realmente supo ponerle cariño al trabajo que nos entrega en un título que por momentos es fantástico.
Para una mujer vikinga fuerte y decidida como Thora, que ha estado en varios navíos que aplastarían por si solos a pequeños hombrecillos, entrar al Valhalla lo es todo. Por lo que has de imaginar su desesperación y angustia cuando su vida es cortada de tajo en una muerte sin gloria. Encontrándose en el purgatorio, Jotun es la historia de Thora, y su aventura para impresionar a las diosas nórdicas al derrotarla en combate. No será fácil, pero eso es lo que debe de hacer si quiere su lugar en la mítica tierra nórdica de los más grandes guerreros, por lo que no descansará hasta no cumplir su objetivo.
El juego tiene gráficos de tipo Sprite realizados a mano y están muy detallados tanto en sus ideas como en la animación. Los alrededores también encuentran un alto nivel de detalle. Es como si estuvieras jugando en una película de Disney y tú eres el protagonista, solo que la historia es un tanto violenta. La banda sonora es aún más impresionante, se ajusta perfecto a cada momento de aventura y combate con apropiadas melodías que te llevarán a compartir muchas emociones que experimenta Thora. Honestamente, si Jotun fuera a ser calificado por su aspecto visual y su audio estaríamos hablando de un título que tendría una calificación de 10. Desafortunadamente el gameplay no está a la misma altura de la presentación, pero no por ello quiere decir que es malo.
Si hay algo que se está volviendo un poco común es que los juegos del género de Jotun trabajan con una especie de «hub» central donde puedes acceder a los distintos niveles. Podrás viajar a cinco áreas distintas a tu placer, tus tareas, serán encontrar dos runas que están juntas y deberás activarlas, para de esta manera puedas desbloquear las puertas de piedra que te separan del dios a derrotar.
Lo que es sorprendente es el poco combate que se desarrolla en gran parte del juego. En lugar de ello, se hace énfasis en explorar y resolver acertijos relativamente fáciles, lo que ayuda a crear una experiencia relajada pero reflexiva en la mayor parte.
Serás recompensado por tomarte tu tiempo y llevar el camino más complicado, tus premios serán coleccionables como las manzanas doradas de Ithunn, que incrementan de manera permanente tu salud, y también los altares de los dioses que te brindarán nuevas habilidades. A pesar de tener poco combate, tus alrededores no están libres de peligros: rayos, tormentas de nieve y águilas gigantes son solo algunos de los obstáculos que tendrás que superar, y mientras algunos de ellos ofrecen muy buenas variantes al estilo de juego, algunas otras se sienten demasiado injustas, sin ninguna pista o advertencia para evitar fallar en el intento.
Cuando estás en combate experimentarás un estilo muy básico lamentablemente. Estás armado solo con tu hacha y estás limitado a solo realizar un corte para despachar a tus oponentes. Incluso así, algunas demoras en la animación cuando realizas un ataque pesado hacen que el movimiento se vuelva irrelevante a menos que encuentres objetos que requieran un poco más de fuerza. Hay poca profundidad en el combate, sin embargo, por la corta variedad de movimientos te verás en la necesidad de mejorar constantemente tus habilidades en tu aventura. Frigg’s Healing, por ejemplo, es el típico encanto de sanación, mientras que el Heimdall Shield te protege de cualquier daño. Y cuando se trata de ir a la ofensiva, el martillo de Thor o la lanza de Odin pueden ser usados para infligir daño excesivo a tu presa.
Las habilidades deben ser usadas con precaución, solo puedes usar una en una limitada cantidad de veces sin visitar un altar de regeneración o enfrentar tu muerte. Y hablando de muerte, las probabilidades de que lo hagas son muy altas, pero con el generoso sistema de «checkpoints» nunca se vuelve tedioso el asunto.
Sin duda alguna, lo mejor de Jotun es también su razón de ser: las espectaculares batallas contra los dioses. Desafiantes, pero siempre justas, cada una cuidadosamente diseñada e inmaculadamente pensada para hacer uso de tu paciencia y habilidad. Necesitarás estudiar y aprender los patrones de ataque, buscando por esas pequeñas aperturas y formular una estrategia que te ayude a realizar un ataque exitoso. A pesar de tener un arsenal limitado de movimientos, tus batallas no carecen de emoción lo que por sí solo vale el juego.
Los jefes que encuentras en Jotun encajan a la perfección con el título y la aventura de Thora, quien al resultar victoriosa te contará pasajes importantes de su vida; todos ellos con una magistral actuación. Y para aquellos que piensen que han terminado el juego, pues tienen un reto extra, el modo Valhala, que hace que los jefes sean aún más difíciles.
Jotun: Valhalla Edition tiene un listón de dificultad alto, que seguramente será una barrera para algunos jugadores, y el combate básico no impresionará a más de uno, pero se mantiene como un juego fantástico. La historia de Thora es encantadora, y te motivará a intentar darle el lugar de paz y gloria que ella busca. Las batallas con los jefes son encuentros creados con maestría donde tu paciencia, el «timing» y tu estrategia te llevarán a la victoria. El juego tiene un personaje que por sí solo te atrapa y te lleva hasta el final del viaje, si éstas no son razones para que pruebes el juego no se me ocurre otra cosa para que pueda serlo.
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