¡Guardianes! Es hora de retomar sus armas y regresar a la Torre porque Bungie y Activision han lanzado la secuela al título favorito de muchos amantes de los juegos de disparos y RPG, Destiny.
Los creadores de uno de los títulos más emblemáticos de Xbox regresan para continuar con la franquicia, que se ha ganado el corazón de muchos jugadores durante los últimos 3 años en dos generaciones de consolas, y en esta ocasión buscan remendar los errores del pasado y entregarle la mejor experiencia a sus fanáticos y a los nuevos jugadores que quieran acercarse a la franquicia.
En esta ocasión, los guardianes se enfrentarán a un nuevo enemigo que amenaza con destruir todo en lo que crees, Ghaul y la Legión Roja. Esta nueva división de los Cabal creará muchos problemas para los guardianes al intentar hacerse con la fuente de toda la Luz, el Viajero. Tras ser derrotado, desalojado de la Ciudad y despojado de tu Luz, deberás reagruparte y comenzar a planear el siguiente paso para derrotar a Ghaul y recuperar todo lo que te han arrebatado.
Si eres un jugador nuevo que se acerca a la franquicia, no deberás preocuparte por no conocer lo que haya sucedido en Destiny 1, ya que Bungie se encargó de hacer esta entrega lo más amigable posible a los nuevos jugadores con tutoriales paso a paso sobre Destiny 2 y evitando lo más posible las referencias a la historia de Destiny 1 en la campaña principal, ya será en tus misiones secundarias y recorridos por los diferentes planetas que posiblemente escuches algún dialogo referente a enemigos anteriores, por lo que podrás adentrarte en este gran título sin dificulta alguna.
El problema principal que tuvo Destiny 1 fue la gran ausencia de una historia directa que atrajera a la audiencia, a pesar de que ésta se encontraba en el juego, era difícil de hilar todo y tenías que realizar demasiadas cosas para obtener todo el acceso al Grimorio. Para esta entrega, Bungie nos prepara un nuevo catálogo de personajes con historias completamente nuevas, más cinemáticas para explicar la historia, y diálogos constantes durante las misiones para que te enteres de lo que está sucediendo en el momento, corrigiendo sus errores de las entregas pasadas.
Pero parece que Bungie vuelve a meter la pata y comete un error al contarte la historia, y es que, a pesar de contar de gran manera la historia principal, el mayor desarrollo de los personajes y el contexto de las nuevas zonas a las que te introduce Destiny 2 se encuentra en misiones secundarias que se encuentran alrededor del mapa. Estas misiones no tienen orden y no son completamente obligatorias, por lo que volvemos al mismo asunto de que pueden llegarse a perder si es que los jugadores se enfocan en la historia principal y en el juego final.
Para hablar de la música hay que recordar un punto bastante importante, Bungie siempre nos ha entregado bandas sonoras apantallantes. Ya sea con Martin O’Donell al mando en títulos anteriores, o con Michael Salvatori para la franquicia, Bungie ha logrado captar toda la esencia de la historia de sus títulos y plasmarla en una hoja con notas musicales para que la orquesta haga lo suyo y transfiera ese elemento visual del juego a uno auditivo para cautivar a la audiencia. Cada una de las canciones creadas para Destiny 2 está pensada para que acentúe los sentimientos del juego y le entregue al usuario el mejor ambiente posible.
En cuanto a las gráficas, a simple vista podríamos ver a Destiny 2 como una expansión de Destiny 1, ya que cuenta con el mismo estilo visual, los mismos enemigos, un HUD casi idéntico, mismos modelos gráficos, por lo que es fácil hacer la comparación directa entre ambos títulos. Pero conforme vas probando más el título, te darás cuenta que han hecho grandes avances en cuanto a efectos visuales y manejo de las luces en los diferentes modelos visuales y animaciones diferentes.
Además de esto, el punto fuerte en el que estuvo trabajando arduamente Bungie fue la construcción de nuevos mundos y mapas, cada uno siguiendo una temática en especial representando a las diferentes clases. Cada uno de los escenarios aprovecha todas las mecánicas de Destiny 2 para crear misiones y recorridos increíbles, podrás llegar a zonas realizando saltos precisos, recorrer amplias zonas en tu colibrí, dispararle a los enemigos utilizando el terreno alto, y apreciar la arquitectura de cada una de las diferentes facciones del título, todo desde un punto de vista completamente nuevo y sin escenarios repetidos, inclusive zonas antes vistas han sido recreadas debido a la historia que transcurre en Destiny 2.
Pero Bungie no solo ha reconstruido su manera de contar la historia y los escenarios que utiliza, sino que también ha cambiado la manera en que interactúas con las diferentes clases y subclases que existen en este universo.
Para comenzar, en Destiny 2 recibirás puntos de habilidad cada vez que subas de nivel o completes alguna misión, con estos desbloquearás nuevas habilidades y elegirás las que te acomoden más. Además, te encontrarás con que ahora cada subclase contiene dos sets de habilidades distintas, en lugar de permitirte elegir las que más te gustan o convengan, esto posibilita un juego más balanceado en el que analizar pros y contras de cada set para cada ocasión es necesario. Finalmente, Destiny 2 te introduce a 3 nuevas subclases, una para cada personaje, estas se basan en habilidades o extras que llegamos a ver en Destiny 1 y simplemente fueron refinados para entregártelas como nuevas, algo con lo que al principio no estaba de acuerdo, pero al analizar cada una es claro el porqué de esta decisión.
Y como buen MMORPG, la interacción con otros humanos es un punto muy importante en el juego. Para esto, Bungie continua con el modelo de mundos abiertos en los que constantemente encontrarás jugadores para que te acompañen a realizar alguna actividad disponible, como los Eventos Públicos, o cruzarse contigo en alguna misión o Asalto. Además de esto, los desarrolladores también apuestan por que las comunidades de jugadores le enseñen lo que saben a los nuevos jugadores y les ayuden a través de los Juegos Guiados, una especie de matchmaking para buscar a jugadores experimentados que buscan ayudar.
Pero, ¿qué es todo lo que puedes hacer en Destiny 2? Pues una vez que termines la historia principal podrás comenzar a ahondar en la historia y desarrollo de cada personaje a través de las misiones secundarias, o puedes enfocarte en aumentar tu nivel de Luz mediante los Asaltos, Ocasos, Incursiones, Eventos Públicos y Patrullas que encontrarás esparcidos a través del universo. Cada una de estas actividades se siente diferente cada vez que la juegas, por lo que fácilmente invertirás más de 100 horas de juego en este título sin que te des cuenta.
Y si el contenido PvE no es lo tuyo, también tendrás a tu disposición dos formas de juego PvP en el Crisol: Casual y Competitivo. En casual encontrarás los modos de captura los puntos, duelo por equipos, confirmar la muerte, entre otros, mientras que en el modo competitivo deberás demostrar tus habilidades en duelo por equipos con vidas limitadas y defiende la base, donde el trabajo en equipo es crucial. Hasta el momento, ambos modos de juego se han mantenido relativamente balanceados en cuanto a habilidades y armas, por lo que será tu trabajo en equipo y combinación de clases lo que te hará salir victorioso en estos modos.
Pero hay dos actividades que destacan de entre estos modos y que han caracterizado a Destiny desde su lanzamiento: la Incursión y Trials of the Nine (previamente conocido como Trials of Osiris).
Para la Incursión, Bungie nos presenta a un nuevo enemigo que llega no solamente a reforzar el asedio de los Cabal, sino a devorar a nuestro mundo. Bungie fue aprendiendo de cada incursión que lanzaron y para el final de Destiny 1 pudimos notar claramente su avance al entregarnos desafíos que cada vez requerían más de un trabajo en equipo y de habilidad de los jugadores. Con Leviatán, la nueva incursión, notarás que desde el inicio requerirás de un gran trabajo en equipo y una comunicación constante entre los jugadores, además de que cada uno deberá conocer su rol y atenerse a este, cumpliendo sus deberes de acuerdo a la clase que estén ocupando con el fin de poder atravesar las diferentes fases y llegar a derrotar al jefe final, Calus. A pesar de adentrarse en nuevas mecánicas y haberse alejado un poco de las que explotaron demasiado (como las temidas plataformas que eran un peligro para todos los cazadores), Bungie logra entregar un desafío que mantendrá entretenido a los jugadores por amplios periodos de tiempo, por lo menos hasta que llegue la siguiente incursión.
En cuanto a Trials of the Nine, el modo multijugador competitivo que llega todos los fines de semana, ya no es exclusivamente un duelo al primero que acabe con el equipo contrario. En esta ocasión, Destiny 2 aprovecha los diferentes modos de juego presentes en el Crisol mediante rotaciones para que los guardianes demuestren sus habilidades para combatir en equipo y para decidir las mejores piezas de equipamiento y habilidades a utilizar de acuerdo al equipo, con el fin de aprovechar cada una de estas.
Para resumir todo esto, Bungie aprendió de Destiny 1 y otros RPG de disparos en el mercado para poder crear una mejor versión de su título y darle una vida nueva a su franquicia, la cual ha estado avanzando a buenos pasos y mejorando con cada uno de estos. Por ahora parece que nos han entregado un título digno de Bungie, falta observar su avance para ver si los jugadores descubren algún desbalance en el título y como lo van a solucionar, además de las siguientes actualizaciones que traerán muchas cosas más que hacer y observar como continuará la franquicia y el plan a largo plazo que es Destiny.
Si fueron jugadores de Destiny 1 que no saben si vale la pena debido a los errores que presentó la primera entrega, les recomiendo ampliamente que adquieran este título y observen el gran crecimiento que ha tenido la franquicia. Y si son jugadores que gustan de juegos de disparos y títulos RPG, podrán encontrar en Destiny 2 un juego que contiene toda clase de géneros, desde los disparos, puzzles, MMORPG, y hasta las plataformas, todo en un título que te garantiza cientos de horas de juego.
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