Hay dos términos en la actual industria que a los desarrolladores indie les encantan, Metroidvania y Soulslike. Ahora, mucha gente entiende a qué se refieren con estos términos, pero después de jugar Blasphemous me llega la pregunta ¿Realmente entendemos esos géneros?

Blasphemous se presenta como un juego 2D de plataformas en el que exploraremos un mapa no lineal, en otras palabras, un Metroidvania ¿cierto? pues no, las reglas de un Metroidvania son simples, explorar un mundo cerrado, que se conecta y los items que encontraremos no ayudarán a seguir explorando.

Si ya han jugado el título sabrán a qué voy y no quiero que se malinterprete lo que quiero decir, el juego no es malo, pero no es un Metroidvania. Para empezar el juego es abierto, aún cuando es un plataformero en 2D, temprano en el juego se dividen tres caminos, mi lógica y experiencia con el género me llevó a intentar primero la opción superior, ahí es donde empezó el problema con lo Metroidvania.

Blasphemous en ningún momento te prepara o avisa para dónde ir, esto por lo general es algo bueno, ya que exploras el juego a tu ritmo, hasta que te encuentras en una zona que no estás listo para enfrentarte, porque el mayor monstruo del juego no son los enemigos, es el plataformeo. Blasphemous está lleno de saltos más complicados de lo que el sistema permite normalmente. Por ejemplo, las cuerdas y escaleras requieren que estés en una posición exacta para que puedas colgarte, esto puede resultar frustrante en especial cuando están sobre picos o una caída letal. Porque sí, el juego tiene los famosos barrancos de Super Mario. Barrancos, en un Metroidvania.

Voy a explicar por qué esto está mal, una de las reglas que expliqué es que el mundo debe estar cerrado, esto significa que, si hay un espacio abierto en la pantalla, ese me debería llevar a otro cuarto, sea a los lados, hacia arriba o hacia abajo. Blasphemous  tiene espacios donde bajas a un cuarto que está en otra pantalla y a la vez tiene caídas donde mueres instantáneamente, esto, combinado con el plataformeo confuso más las escaleras que no siempre responden. Hacen que el título se sienta injusto y no por algo planeado a que sea así, se siente como algo barato.

Lo cual me lleva al otro aspecto: la inspiración de Dark Souls. Blasphemous no es tímido escondiendo que una de sus inspiraciones es el juego de From Software, cosa que hace muy bien, todos los elementos están ahí y funcionan, los enemigos requieren que reconozcas patrones, el posicionamiento es la clave entre salir victorioso o morir, la forma en la que el juego maneja la experiencia y los castigos por morir varias veces.

Lo hace tan bien que más bien se siente como si estuvieras jugando un Dark Souls en 2D y nada que ver con Metroidvania.

Ahora las mecánicas que lo hacen único son buenas, al morir se queda la experiencia que tenías en donde moriste y tienes que volver por ella, pero a diferencia de otros juegos del género, si vuelves a morir en vez de borrar la pasada y quedarse con la más reciente, se añade un nuevo fragmento de culpa. Esto es un arma de dos filos, si eres bueno, aceptarás el reto e irás limpiando el mapa de tu culpa, pero si no eres tan hábil irás haciéndote cada vez más difícil el juego. Blasphemous compensa un poco esto con unas estatuas donde puedes pagar experiencia, para limpiar tus fragmentos de culpa.

El sistema de pelea es tan bueno y malo como los de la serie de los juegos de From Software, si disfrutas de estos lo amarás, pero si nunca te han gustado, no creo que disfrutes los combates, en especial con los jefes donde ponen a prueba tu capacidad de responder.

Hablando del apartado gráfico el juego es maravilloso, las cinemáticas y los sprites están finamente animados, los ambientes de la ciudad de Custodia, reflejan mucho a Sevilla y tomando en cuenta que el estudio es español es un buen guiño a algo de donde ellos vienen, el arte toma iconografía religiosa y es muy gráfico con su violencia. Puede resultar algo controversial ya que en imágenes e historia toma la temática religiosa, pero no desde un punto de vista positivo hacia esta.

Con todo el estilo de los Dark Souls, nuestro personaje no tiene un nombre y se refieren a él como el penitente, también la historia es contada más por medio de descripciones de items y entornos.

En el apartado sonoro, la música es buena y tiene mucho ese estilo de música folklórica español, ambiental cuando debe serla como en la aldea y épica cuando es la hora de pelear con los jefes.

Blasphemous es muy bueno, cuando se tiene claridad de qué es lo que se espera, al principio fue frustrante porque lo pensaba como un Metroidvania, pero cuando dejé de verlo así y lo pensé como un Dark Souls el juego funcionó mucho mejor, sigo insistiendo en que no debería haber muertes instantáneas y manejarlo como lo hizo Hollow Knight o Owlboy donde al caer, te regresan a la última plataforma sólida que pisaste.

Definitivamente merece una checada si disfrutas los retos en los videojuegos.