Respawn Entertainment y Electronic Arts han sabido mantener interesados —hypeados— a todo el mundo con Titanfall y fue apenas el pasado fin de semana cuando todos los poseedores de un Xbox One y una PC con los requisitos necesarios pudieron probar esta nueva franquicia de EA y Respawn. Si alguno de ustedes no tuvo la oportunidad de jugar la beta pública, continúen leyendo.
Titanfall se puede definir con dos palabras: divertido y balanceado. No hay mejores palabras para expresar la experiencia que me ha ofrecido Titanfall en su beta y que inmediatamente se convierten en esa características que lo distinguirán de otros juegos del género. Quizás esas dos palabras hacen que el género sienta ese aire fresco que hacía falta, pues a pesar de que el control sea casi una calca del ya estandarizado Call of Duty, no deja de hacernos sentir ese ligero soplo refrescante.
Se dispuso de tres modos de juego de los cuales dos eran ya unos clásicos de los FPS: duelo por equipos o Team Deathmatch, el de capturar tres zonas en el mapa el mayor tiempo posible y uno exclusivo para el uso de titanes en el que si los destruían tendríamos que esperar a que terminara la ronda.
Como ven no se intenta revolucionar el género, es al momento de jugar donde todo se siente fresco. Por ejemplo, el hecho de que cuando te declaran perdedor o ganador de la partida hay que correr al punto de extracción para huir o matar a los perdedores antes de que los recojan.
Lo primero que he notado en Titanfall es el balance entre ir a pie o pilotear un titán ya que a pesar de que los titanes son las estrellas, no son máquinas todo poderosas con las cuales aniquilar a todo soldaducho que vaya a pie y saltando. De hecho, los titanes pueden ser fácilmente vencidos por un pequeño grupo de soldados gracias a las armas Anti-Titán que siempre serán un arma por defecto junto con la principal y la tradicional pistolita.
Las partidas constan de 6 vs. 6 y cada jugador tiene que esperar tres minutos para poder invocar a su titán, con eso dejan la posibilidad de que en la partida haya 12 titanes en combate. Podrían pensar que eso ha de ser una locura pero no es así, como dije, los titanes pueden ser vencidos fácilmente y eso es por el mismo balance que había mencionado.
Es cierto que un titán se siente más poderoso pero incluso un único soldado enemigo puede treparse a tu titán y destruirlo por lo que hay que salir de la máquina y acabar con el intruso. Probablemente, esto a más de uno le dio una sensación de estrategia y de pensar bien el momento para llamar al titán, incluso de llamarlo y dejarlo en automático mientras nosotros nos dedicamos a asaltar un titán enemigo.
También pudimos disfrutar de dos mapas y aunque pareciera ser poco (recordemos que era una beta) jamás me vi aburrido. La verticalidad que le dan los mapas y la mecánica del parkour gracias al jetpack son sin duda otros protagonistas. Pareciera ser complicado pero es tan natural que inmediatamente cuando tomas el control se pueden recorrer los grandes mapas de manera rápida para llegar a las azoteas y cazar a los titanes.
Pero no todo es bueno y es que, a pesar de ser una beta, gráficamente Titanfall no pareciera ser del todo un juego de siguiente generación. No es que se vea mal, se ve bien pero no está al nivel de un Ryse o Forza 5. Aun con esto no se demerita para nada la diversión y la experiencia que ofrece el juego.
Por último está el tema polémico de los bots. Yo no sentí que fueran una molestia como se dice que son, aunque tampoco son una gran ayuda, aun así espero que la I.A. aumente pues en realidad sólo me han servido para desbloquear más rápido accesorios para las armas y cartas. Por cierto, las cartas son una especie de los conocidos perks, tienen que ser equipadas antes de la partida y son consumibles, había cartas que te daban nuevas armas o versiones más poderosas, unas que acortaban el tiempo de espera del Titán o que te permitían revivir justo en el lugar en donde morías.
En conclusión, la beta de Titanfall sólo ha hecho crecer más el hype pero a su vez está afirmando que será un juego divertido y que no va defraudar, al menos hasta el momento no parece que lo vaya a hacer. Aún falta mucho por ver ya que sólo nos daban la oportunidad de controlar a un titán, pero si una simple beta ha logrado engancharme, no puedo imaginar lo que hará el juego completo.
Titanfall estará disponible en Xbox One y PC el 11 de marzo y unos días después en Xbox 360.
