Los shooters son algo que parece no se lleva con Nintendo. Muy rara vez hemos visto a la compañía apostar por juegos hechos en casa de este tipo, pero los tiempos cambian y es por eso que ha llegado Splatoon, un juego que quiere cambiar un poco el concepto de lo que son esta clase de títulos con su ya característico estilo caricaturesco y un modo de juego poco común. Tuvimos la oportunidad de probar el título, así que los invito a seguir leyendo para conocer un poco más acerca de esta nueva franquicia de la gran N.
Splatoon es un third person shooter que no quiere atraer tu atención con grandes gráficos, sino más bien con un modo de juego simple pero que conforme vayas conociendo y adaptándote a él, puede volverse tan complejo como tus habilidades te lo permitan.
Probamos el modo multijugador, que es sin duda el punto más fuerte de este título. En uno de los modos, participaremos en batallas de dos equipos conformados por cuatro jugadores en un escenario bastante amplio lleno de rampas y cajas que podremos utilizar en nuestra estrategia para acabar con nuestros enemigos.
Los controles son bastante amigables; el gatillo derecho es para disparar, el botón Y te servirá para convertirte en calamar y fundirte en la pintura de tu color, que te servirá para cargar tu arma y moverte más fácilmente por el escenario, siempre y cuando la zona esté pintada con tu color.
El botón A te servirá para dar un pequeño salto y el botón R para lanzar una clase de bombas de pintura. Hasta aquí, no hay problema con los controles, hasta que debes controlar la cámara.
Esta se manipula gracias al giroscopio del Wii U GamePad, y esto, al principio, puede volverse algo confuso y hasta tedioso, sobre todo si estas a punto de acabar con rival y en la emoción mueves el control, la cámara se desvía y tu puntería se va de inmediato hacia abajo.
Parece ser que esto puede dominarse después de un tiempo e incluso puede cambiarse la opción de controlar la cámara con otro botón o igual dejarlo en automático. Mientras tanto, estarás disparando muchas veces al cielo o a las paredes mientras un enemigo por detrás te hace pedazos.
Ahora hablemos del modo de juego, que es otro de los puntos que más ha llamado la atención, y esto se debe a que a diferencia de otros juegos del mismo tipo, el objetivo del juego no es cuántas muertes hagas, sino cuánto porcentaje del escenario pintaste con el color de tu equipo.
Esto no es algo que sea muy común en esta clase de juegos, pero no por eso resulta aburrido, al contrario, está tan bien planteado que hace que tengas batallas bastante divertidas. Entre los cuatro jugadores, habrá un jugador que cuenta con una especie de rodillo, el cual, por obvias razones, pinta más que los demás jugadores.
Este personaje también puede defenderse, pero no tanto como los que cuentan con un arma. Aquí es donde entra un poco de la estrategia del juego, pues puedes dejar a este jugador solo y que pinte tanto como pueda aunque acaben con él una y otra vez, o tratar de defenderlo y hacer que pinte más y más, mientras tú no solo acabas con los enemigos, sino también con tu arma ayudas a pintar el escenario.
Splatoon contiene un modo de juego donde no importa cuántas veces te eliminen, sino cuánto has podido pintar y acabar con los enemigos para que no puedan hacerlo. Esto atraerá a más de uno, pues el concepto, como ya mencioné, es simple para que cualquiera pueda jugarlo, sin embargo, se puede volver igual de complejo que grandes títulos del género.
Visualmente, el juego luce muy bien y se ve que estará lleno de color. En este aspecto, creo que el juego cumple a la perfección y explotando bien el potencial del Wii U. Un título que le viene bien a la consola de Nintendo y que promete mucho, aunque aún hay que esperar para ver cómo responden los servidores de la compañía, pues en este aspecto ha dejado mucho que desear más de una vez. Esto ha sido todo de mi parte, les escribió su amigo, el medico del pixel, hasta la próxima.